La inhabilitación especial de Jesús Otero, que ganó las elecciones con una candidatura independiente, deja en el aire la Alcaldía de Monterroso
LUGO, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a siete meses y 15 días de prisión al alcalde de Monterroso y exsubdelegado del Gobierno, Jesús Otero, como autor de un delito continuado de tráfico de influencias y al que fuera jefe provincial de Tráfico, Julio González, a dos años y tres meses, por prevaricación, en el caso de las multas.
Además, ha condenado al político de Independientes Terra do Asma, y antes militante del PSOE, a una "inhabilitación especial para empleo o cargo público" por dos años y tres meses, lo que deja en el aire la Alcaldía de Monterroso, que tendría que abandonar.
Al funcionario de tráfico se le impone, además, una multa de siete meses y quince días, con una cuota diaria de cinco euros, e inhabilitación "especial" para el ejercicio de "sus funciones por el tiempo de dos años".
Como autor de otro delito continuado de prevaricación, el funcionario también debe someterse a la pena de "inhabilitación especial para empleo o cargo público por el tiempo de cuatro años y tres meses".
INDEMNIZACIÓN
Ambos, además deberían "indemnizar, conjunta y solidariamente", al Estado en la cantidad de 9.180 euros en concepto de perjuicio causado, además de tener que hacerse cargo de las costas del juicio.
El resto de imputados, 20 más, entre los que se encuentra el alcalde de Meira, el socialista Antonio de Dios, y exalcalde de Muras, el popular Isaam Algnam Azzam, y el deán de la catedral, Luciano Armas, han sido absueltos, así como el alcalde de Pedrafita, el socialista José Luís Raposo, a quien ya el fiscal había retirado la acusación.
Éste es el segundo fallo relativo a la trama de retirada de multas de tráfico en Lugo, después de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) obligara a la Audiencia a emitir nueva sentencia, tras absolver a todos el pasado año por un defecto de forma.
Esta supuesta trama habría operado a través de la jefatura de tráfico de Lugo, en el año 2007, cuando Jesús Otero era el subdelegado del gobierno en Lugo y Julio González el responsable de la jefatura provincial de tráfico.
