Niega el uso de fondos públicos para apoyar la campaña de Baltar Blanco y añade que el que diga lo contrario "sabe a dónde debe ir"
OURENSE, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Partido Popular de Ourense, José Luis Baltar Pumar, desvinculó hoy la contratación de personal en la Diputación provincial del congreso que elegirá a su sucesor el próximo 30 de enero y argumentó que "renovar" contratos es lo "normal" a principios de año en la institución que dirige.
"Cuando los contratos van terminando y la partida de personal se acaba tenemos que destituir en octubre, noviembre o diciembre, pero ahora vienen a pedir la renovación", justificó en el Liceo Recreo Ourensano, en un acto con 50 universitarios que participarán en el Programa Europeo de Becas Internacionales. "No tiene nada que ver con la campaña interna", replicó a las voces que le acusan de condicionar a los compromisarios ofreciendo contratos en la Diputación a cambio del apoyo electoral a su hijo y uno de los aspirantes a sucederle, José Manuel Baltar Blanco.
En su intervención, negó el uso de fondos públicos para su campaña y señaló que quien diga lo contrario "ya sabe a dónde tiene que ir". "Nosotros hacemos las cosas como hay que hacerlas, de acuerdo con la ley", sentenció.
Con todo, admitió que "llama" a los alcaldes "para muchas cosas" desde la Diputación y añadió que no le preocupa "si hace alguna llamada que no es (para un tema estrictamente de la institución provincial)". "También hago llamadas oficiales desde el teléfono particular de mi casa que pago a lo largo del año y nunca le dije a la Diputación que me tenía que pagar un duro ni llevé listados o facturas", sentenció. Eso sí, señaló que "si alguien se empeña en que se seleccionen las llamada", no tendrá "inconveniente en pagarlas".
Pese a la intensa campaña que vive el PP de Ourense, Baltar Pumar advirtió al líder del PSdeG, Manuel Vázquez, que "no obtendrá ninguna rentabilidad política" de estas "disputas", ni tampoco el BNG. "En el PP somos lo suficientemente inteligentes para utilizar las armas de cara al congreso pero, a partir del próximo 30 de enero nos uniremos y trabajaremos contra ellos", avisó.
"BETADINE" A LAS SECUELAS
En su intervención, Baltar Pumar reconoció que en esta lucha interna entre dos candidaturas "puede dejar secuelas", pero puntualizó que una vez concluido el congreso "hay que echar betadine y que cicatricen las heridas". A partir de ahí garantizó que, por su parte, "no habrá ningún problema".
Sobre la elección de compromisarios hizo una evaluación "altamente positiva" ya que, explicó, la candidatura de Baltar Blanco logró "unos 900 delegados" frente los 300 de su rival, el alcalde de Verín, Juan Manuel Jiménez Morán.
PRESENCIA EN LA SEDE
Sobre su presencia y la de Baltar Blanco en la sede del PP de la ciudad de Ourense durante la elección de compromisarios, señaló que a él "nadie le puede prohibir estar en el despacho de la sede provincial" mientras sea el presidente. "A mi hijo no le notificaran ningún acuerdo adoptado y cuando se lo notificaron abandonó la sede", añadió. Al tiempo, dijo tener "versiones" de que el otro candidato "sí estaba en la sede del PP de Verín", aunque afirmó que no le preocupa.
Por último, Baltar Pumar lamentó las "deserciones" de algunos dirigentes políticos que trabajaron a favor de la campaña de su hijo "en los primeros días" y, a continuación, "tres días antes se apuntaron al otro lado". "Eso sí que es grave, cada uno puede ir con quien quiera, pero no veo bien las traiciones", concluyó.
