SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz municipal del BNG en Santiago, Rubén Cela, ha exigido que el alcalde, Ángel Currás, pida "disculpas" por la situación que vive el Ayuntamiento --con diez de los 13 ediles imputados, algunos en varias causas-- y singularmente por la 'Operación Pokémon', cuyo sumario está parcialmente levantado y del que se desprende, en palabras del concejal nacionalista, que el PP ha convertido el Consistorio en una "cueva de Alí Babá".
Asimismo, Rubén Cela ha cuestionado que la "unidad" del gobierno local que el regidor asegura que existe y se ha referido a partes del sumario que muestran división, así como el hecho de que concejales (Adrián Varela y Rebeca Domínguez) se ratificasen en sus declaraciones ante la jueza en las disensiones con el núcleo del alcalde, quien replicó ante la instructora de la Pokémon que declaraciones de la concejala de Normalización Lingüística eran "calumnias".
Para Rubén Cela, Currás debería, "antes de dar" lecciones de "ética periodística", darlas de "ética política", y tras lamentar que haya "determinadas personas que se siguen aferrando a su sillón como auténticas lapas", ha considerado que el regidor compostelano debería "pedir disculpas a los vecinos, convocar un pleno extraordinario para dar cuenta de lo que ocurrió y dimitir". Además, ha exigido que haga "dimitir" al resto de concejales imputados en la Pokémon o en otras causas, para los que, ha dicho, no prejuzga la presunción de inocencia ante la justicia.
En todo caso, Rubén Cela subraya que "políticamente son culpables del mayor escándalo institucional" en Santiago de Compostela. Así, con lo que se sabe hoy en día, "deberían darse explicaciones", ya que, la apertura del sumario ha dejado a la luz "las cloacas" del Pazo de Raxoi.
"ABSOLUTAMENTE ROTO"
Rubén Cela ha abundado en que el gobierno local está "absolutamente roto, desprestigiado, no hay ningún tipo de coordinación y es incapaz de gestionar al día este ayuntamiento", ha considerado Rubén Cela, quien también ha criticado, en referencia al alcalde, Ángel Currás, que "matar al mensajero es lo más fácil", pero "el mensaje sigue ahí".
"Desde la entrada del PP en el Ayuntamiento no fue una sucesión de malas (prácticas) puntuales, sino que fueron una sucesión de corruptelas y malas prácticas graves y gravosas para esta ciudad sin que nadie asuma responsabilidades políticas", ha expuesto.
