A Mesa critica la "reducción del 20%" en las cuentas de Política Lingüística, que achaca en un "tardofranquismo"

SANTIAGO DE COMPOSTELA 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente de A Mesa pola Normalización Lingüística, Carlos Callón, criticó hoy la reducción de un 20 por ciento de las cuentas de la Secretaría Xeral de Política Lingüística para 2010 ya que, mientras se reduce las partidas destinadas a las promoción interna, se incrementan las de promoción exterior, en el marco de una política autonómica que situó en el "tardofranquismo".

"--Para Feijóo-- el gallego cuanto más lejos, mejor", aseveró Callón en rueda de prensa, mientras denunció que la Xunta destine a actividades de promoción del idioma fuera de Galicia "casi un 15 por ciento más" y reduzca, "en un 36 por ciento, las partidas para cursos de normalización lingüística; en un 25 por ciento el fomento del gallego desde las asociaciones" o "un 20 por ciento" la cantidad para "ayudas a los equipos de normalización y dinamización lingüística" de los centros educativos.

Así, consideró que el proyecto de presupuestos para 2010 pretende "desnutrir el idioma gallego" y reclamó al presidente da Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que "aparque la prepotencia y el odio contra la lengua gallega". "Un presidente que no escucha a la sociedad", afirmó.

En este sentido, lamentó que se contemple la posibilidad de que la toponimia incorpore una segunda forma "castrapeada"; que la papelería de la Xunta "ya no está en gallego"; y que la conselleira do Mar, Rosa Quintana, "se niegue a responder por escrito a un diputado en gallego".

"Aunque le duela, también es cooficial", ironizó Callón, que acusó de "cinismo político" al actual Ejecutivo autonómico por considerar "que no toman acciones contra el gallego".

Finalmente, hizo un llamamiento "a expandir el espíritu de la manifestación del 18 de octubre", en la que más de 50.000 personas se movilizaron en Santiago "en defensa del gallego", para "mantener la tensión reivindicativa" y para conseguir "una verdadera libertad lingüística y no la libertad falaz de Feijóo".