Aetinape reclama una investigación sobre las causas del suceso y cómo funcionó el operativo de salvamento
LUGO, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
La llegada del pesquero gallego 'Zamorano Primero', en el que uno de sus nueve tripulantes provocó un incendio en la sala de máquinas en la madrugada del lunes y luego se lanzó al mar, llegará entre el domingo y la madrugada del lunes al puerto lucense de Burela, donde tiene su base.
Así lo confirmó hoy a Europa Press el responsable de Capitanía Marítima de Burela, Ángel Fernández, tras explicar que la embarcación navega en estos momentos "por sus propios medios y con su máquina a una velocidad de nueve nudos" y recorrió unas 170 millas desde la situación en la que se encontraba ayer por la mañana.
Al 'Zamorano Primero' le quedan unas 980 millas para llegar al puerto lucense y, según los cálculos de Capitanía Marítima de Burela, "si no varían las condiciones climatológicas" y mantienen una velocidad media de 8,5 a 9 nudos, tardarían unas 115 horas, entre cuatro y cinco días, en llegar a su base.
Por su parte, el remolcador 'Valdivia', que partió sobre el mediodía de ayer de Vigo para ayudar al pesquero lucense a regresar a puerto en caso de que fuera necesario, alcanzará mañana al 'Zamorano Primero' en su ruta de regreso.
SUBDELEGACIÓN DEL GOBIERNO
En esta línea, el subdelegado del Gobierno en Lugo, Jesús Otero, comentó que "es probable" que no haga falta remolcarlo y sólo lo acompañe y precisó que, si no es necesario remolcarlo, se "puede mantener la velocidad a nueve nudos, mientras que en caso contrario disminuiría en tres nudos".
El pesquero sufrió un incendio en la madrugada del lunes, provocado por uno de los tripulantes, después de que agrediese al patrón y a dos marineros, y se arrojase posteriormente al mar. Los hechos se produjeron cuando el barco se encontraba a unas 180 millas de la Isla de Flores, en el archipiélago portugués de las Azores.
Los dos miembros de la tripulación heridos que fueron evacuados en helicóptero recibieron ayer el alta, mientras que el patrón, que también sufrió heridas, aguanta, según el subdelegado, "con calmantes" porque no quiere abandonar el barco. El patrón del buquem Antonio José Rojo, de 42 años de edad, fue golpeado con una barra de hierro en las piernas y también presenta contusiones en los brazos.
Sobre las causas que produjeron el suceso, el subdelegado del Gobierno en Lugo comentó que, "hasta que la tripulación esté tranquila, de sus testimonios se podrá deducir algo". No obstante, subrayó que "será muy difícil" que se sepa el motivo del suceso, si bien matizó que no ocurrió "en una situación de normalidad".
Además, reconoció que el marinero que provocó el incidente, que se arrojó al mar, "lo más probable" es que aparezca muerto y admitió que "apenas hay esperanzas de que haya sobrevivido" debido a las temperaturas del agua y a las corrientes marítimas que dominan la zona.
INVESTIGACIÓN
Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Titulados Náutico-Pesqueros (Aetinape), José Manuel Muñiz, reclamó que se abra una investigación para conocer exactamente las causas que provocaron este suceso y determinar si el dispositivo de salvamento marítimo se activó correctamente.
En declaraciones a Europa Press, Muñiz censuró el "espectáculo" que cree que ha dado la Capitanía Marítima de Burela al hacer declaraciones sobre el caso "sin conocer exactamente qué pasó en el barco". A su juicio, "es punible que un funcionario público no actúe con prudencia".
Además, demandó que se aclaren las informaciones "contradictorias" sobre el funcionamiento del dispositivo de salvamento para demostrar si se activó "con la prontitud necesaria". Sobre este caso, el presidente de Aetinape señaló que "estas cosas no son casuales" y es necesario "abordar la raíz del problema" porque "en un buque se vive con mucha tensión y es necesraio mejorar estas situaciones".
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