(Ampli.) El Govern revela que SFM suprimió del proyecto de metro medidas que habrían evitado las inundaciones

El actual Ejecutivo no descarta emprender acciones por la vía judicial para pedir responsabilidades

Europa Press Islas Baleares
Actualizado: viernes, 28 septiembre 2007 17:24

PALMA DE MALLORCA, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

El conseller de Movilidad y Ordenación del Territorio, Gabriel Vicens, informó hoy de que el Consejo de Administración de Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) modificación el proyecto de metro, reduciendo el sistema de drenaje inicialmente previsto, y que, en caso de haberse mantenido "probablemente" habría evitado las inundaciones ocurridas.

En rueda de prensa posterior al Consell de Govern, Vicens presentó el documento firmado por el Consejo de Administración de SFM en el que se autoriza la modificación del proyecto inicial en el tramo del polígono de Son Castelló, fechado el 16 de mayo, a 11 días de las elecciones y cuando la inauguración del metro había tenido lugar 24 días antes --23 de abril--.

Según explicó el conseller, la modificación del proyecto supuso eliminar un tubo de subterráneo de evacuación de aguas pluviales hecho de hormigón y con una amplitud de 1,5 por 0,75 metros --el cual debía discurrir bajo la Vía Asima--, por otro de menor diámetro (1000 milímetros) y de PVC. Asimismo, se suprimió una conexión entre este segundo canal y la red de pluviales de Emaya al otro lado de la calle que debía servir para evitar las inundaciones en superficie.

Vicens aseguró que, "probablemente", de haber ejecutado el proyecto tal y como estaba diseñado inicialmente, "habría funcionado" y no se hubiera producido la entrada de agua que inundó varias estaciones y que mantiene cerrada la línea de metro de forma indefinida. "El el documento no figura ninguna justificación para estos cambios", añadió.

Además de estas variaciones, el documento, firmado por la ex consellera de Obras Públicas y presidenta de SFM, Mabel Cabrer, y por el entonces gerente de esta compañía pública, Jaime Nadal, da el visto bueno a la sustitución de una conexión de 800 milímetros de diámetro por otra de 600.

"Está claro cuáles han sido las causas de las inundaciones. El agua no entra en los colectores, va por la calle y entra por los respiraderos y las entradas. No hay que ser ingeniero para ver que de este modo (con las modificaciones) el agua inundaría esta zona. Se ha hecho una obra de 200 millones que ha resultado un desastre", dijo.

Por otra parte, Vicens señaló que, aunque en el proyecto ya modificado seguían figurando cubiertas sobre los accesos peatonales a las estaciones, ninguno de estos elementos fue instalado. "Incluso la estación intermodal debería haber tenido cubierta... y no tiene", destacó. Subrayó, además, que el diseño inicial ya contenía deficiencias porque no contemplaba que la zona de Son Sardina no tiene red de pluviales propia.

En este sentido, mencionó algunas deficiencias "menores" detectadas por la auditoría técnica encargada por la Conselleria, como las filtraciones de agua en diversos tramos del túnel, la presencia de obstáculos en varias salidas de emergencia y la inaccesibilidad para personas con discapacidad física en algunas partes de la instalación de metro.

DEMANDA JUDICIAL

Vicens dijo que no descarta "en absoluto" usar la vía judicial para pedir responsabilidades a quien corresponda por lo ocurrido, aunque apuntó la dificultad para determinar el grado de responsabilidad de cada uno de los agentes implicados ya que son once las empresas que ejecutaron los trabajos y una parte importante de la obra aún no ha sido recepcionada.

"La magnitud de las obras es importante, aunque no se puede adelantar una cifra de su coste. Sí tenemos la certeza de que serán complicadas y que algunas no se podrán llevar a cabo, ya que se trata de trazados ya construidos. No podemos cambiar las estaciones de sitio, pero evitaremos, eso sí, que vuelvan a entrar esas cantidades masivas de agua", agregó.

Por otra parte, el conseller informó de que durante la última inundación, en la noche del pasado martes 25 de septiembre, el agua que entró en la estación de Jacint Verdaguer afectó a las vías, no sólo del metro, sino también del ferrocarril, y que además se produjeron filtraciones de agua en la estación de autobuses.

En cuanto a la reapertura del metro, Vicens evitó apuntar una fecha "porque se está analizando las obras que habrá que realizar", aunque remarcó que se pondrá de nuevo en marcha el servicio de transporte "lo antes posible, pero siempre en condiciones dignas para los usuarios y, por supuesto, cuando la seguridad esté garantizada".

Preguntado por el informe del Cuerpo de Bomberos de Palma, realizado tras la actuación que realizaron tres días después de la inauguración del metro en la estación de Son Sardina, el máximo responsable de Movilidad del Govern aseguró que su Conselleria no tiene conocimiento de la existencia de ese informe, remitiendo la pregunta a la ex consellera del ramo, Mabel Cabrer.

"PREPOTENCIA CIEGA Y DESMESURADA" DE CABRER

Vicens también se refirió a Cabrer y a las acusaciones vertidas desde el PP acerca de la inacción del nuevo Govern entre la primera y la segunda inundación. Pidió a la ex consellera que "en lugar de acusar, asuma la responsabilidad con valentía y no dé muestras de prepotencia ciega y desmesurada". Añadió que el PP debería adoptar una actitud de colaboración ya que, reiteró, "pueden ayudar mucho en la labor de detección de las causas".

"Trabajamos intensamente pero no está resultando fácil porque estamos encontrando 'resistencias' a la hora de hacer averiguaciones sobre la ejecución del proyecto y sobre los problemas que se van hallando", lamentó.

Según explicó, el actual equipo de la Conselleria está trabajando desde antes de que se produjeran las inundaciones y se solucionado la entrada de aguas pluviales en la plaza de Santa Elisabet, tapando agujeros y arquetas, así como los problemas existentes en los accesos a los sistemas de seguridad.

También explicó que se ha llevado a cabo la revisión y reparación de los sistemas de bombeo, de ascensores y escaleras mecánicas, limpieza de tuberías, revisión de cableados y sistemas de frenado de los trenes y de las instalaciones, así como de la señalización de los túneles. Se ha solicitado informes a Gesa, a la empresa de mantenimiento del metro, la dirección de obra y el cuerpo de bomberos, al margen de la citada auditoría técnica encargada a Ineco-Tifsa.

Vicens destacó la coordinación con el Ayuntamiento de Palma y subrayó que todas las acciones realizadas han permitido diseñar y dar inicio a las obras que comenzarán a aportar soluciones a los problemas detectados.

"Las acciones se iniciaron el día 23, al día siguiente de la primera inundación, pero se tenían ya los permisos necesarios, por lo que las acusaciones de que el Govern no ha hecho nada entre la inundación de agosto y la de septiembre son planteamientos ridículos", manifestó.

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