PALMA DE MALLORCA, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Govern, Francesc Antich, achacó hoy la elevada deuda pública de Baleares, que, según el Banco de España, podría alcanzar este año los 3.900 millones de euros, a las "importantes" inversiones públicas para afrontar la crisis económica y a la "herencia" del PP, que dejó proyectos, como el Metro de Palma y el Palma Arena que han terminado "costando el doble", respecto a su presupuesto inicial.
En una rueda de prensa, con motivo de la cumbre 'El reconocimiento de la insularidad en la política regional europea', que se celebra en Palma, Antich recalcó que durante esta legislatura, el Ejecutivo balear "ha tenido que salir al paso de muchísimos temas que no se han gestionado como debieran haberse hecho" durante el Govern de Jaume Matas.
Además, indicó que la deuda pública se debe enmarcar en una legislatura con "muchas dificultades", caracterizada por un momento de crisis económica, que afecta "a lo privado y a las instituciones públicas", que, además, han visto disminuida la recaudación a través de los impuestos.
Por ello, dijo que estas circunstancias requerían de una "respuesta importantísima" de las instituciones públicas, teniendo en cuenta que la economía privada estaba "parada" y, por tanto, "hacía falta que se hicieran importantes inversiones, de las cuales una parte han ido a deuda".
"El Govern actual ha hecho un esfuerzo muy importante, pero hay que marcar una diferencia, ya que en momentos en los que la parte económica iba sobre ruedas, se hicieron en la anterior legislatura importantes esfuerzos de inversión pública, lo cual ha hecho que algunos sectores económicos crecieran de forma desmesurada, algo que no ha sido nada bueno para Baleares", criticó Antich.
Sin embargo, resaltó que en estos momentos en los que el sector privado estaba "parado, sí que era necesario, congruente y coherente que desde las instituciones públicas hiciéramos un sobreesfuerzo", a pesar de que ello supusiera incrementar la deuda de Baleares.
No obstante, el presidente del Ejecutivo autonómico remarcó que Baleares ha sido la Comunidad "más austera" en los Presupuestos de 2010, después de que hiciera una "rebaja importante" de sus cuentas públicas del 4,9 por ciento, hasta situarlas en 3.384 millones de euros.
