Permanecerán nueve meses adiestrando a dos batallones afganos y la misión costará 200.000 euros mensuales
MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados aprobó hoy, por 34 votos a favor y el único voto en contra de IU-ICV, el despliegue de 52 instructores militares que se encargarán de adiestrar a dos batallones del Ejército Nacional Afgano en Herat con un coste de 200.000 euros mensuales más una inversión inicial de 200.000 euros para infraestructuras.
En su comparecencia ante la citada comisión de la Cámara baja, el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, explicó que la misión tiene una duración estimada de unos nueve meses y que los dos Equipos Operativos de Instrucción y Enlace (OMLT) españoles formarán sendas unidades logística y de servicios de base de la primera Brigada del 207 Cuerpo del Ejército Nacional Afgano, con base en Camp Stone, a unos 15 kilómetros al sur de la base española de Herat, capital de la provincia homónima, en el oeste del país.
El grupo incluirá instructores, enlaces sanitarios y efectivos encargados de movilidad y transporte y se incorporará a zona de operaciones "en fechas muy próximas", "en muy pocos días". La misión, explicó el ministro, tendrá una duración mínima de nueve meses con otros tres meses para consolidar el entrenamiento y se realizarán los correspondientes relevos. No obstante, advirtió de que la duración de la misión es "una estimación razonable" de los mandos españoles, por lo que podría variar en función de las capacidades de aprendizaje de los soldados afganos.
Alonso incidió en que la formación del Ejército afgano es "uno de los pilares clave" para la seguridad y la consolidación del Estado en Afganistán y, por extensión, para toda la comunidad internacional. Tras manifestar su "recuerdo emocionado" por la muerte de dos militares españoles y un intérprete afgano ayer en Farah, Alonso comenzó su intervención subrayando el compromiso del Gobierno con la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán y con el resto de misiones internacionales de paz.
El ministro resaltó que España está en Afganistán "bajo mandato y propósito" de Naciones Unidas, con el respaldo del Congreso y de la opinión pública española, con el objetivo de que el personal encargado de reconstrucción y labores humanitarias "pueda actuar en un ambiente seguro".
El ministro hizo hincapié en que la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad está en Afganistán, con el amparo de Naciones Unidas, para garantizar la seguridad y posibilitar así las tareas de reconstrucción y subrayó que la estabilización del país es "imprescindible para todo el conjunto del planeta".
"Sin suelo estable de seguridad no hay desarrollo y sin desarrollo no hay éxito", sostuvo Alonso, antes de incidir en que el objetivo de ISAF es conseguir seguridad, gobernabilidad y desarrollo económico y social de Afganistán. "Seguridad para la reconstrucción", resumió.
BOSNIA, KOSOVO Y LÍBANO
En cumplimiento del artículo 18 de la Ley de Defensa Nacional, el ministro informó a la Comisión de Defensa de la situación de las misiones internacionales y observadores militares que España mantiene desplegados en el exterior.
Explicó que en la actualidad hay 2.575 efectivos destacados en las operaciones de paz con participación española (Bosnia, Kosovo, Afganistán y Líbano) y trece observadores militares en Sudán, Etiopía, Macedonia, Kosovo, Serbia, Montenegro y en República Democrática del Congo.
Señaló además que España asumirá el mando de la operación Althea de la Unión Europea en Bosnia a partir de diciembre y que también se plantea asumir el mando de las tropas de la ONU en Líbano a partir de febrero de 2009, una vez se acuerde el nuevo mandato de la operación en agosto del próximo año. Sobre Kosovo, subrayó que el Gobierno apoya la consecución de una nueva resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas con un acuerdo que aglutine a todos los actores enfrentados.
En el turno de portavoces, el representante de IU-ICV, Gaspar Llamazares --el único diputado que se opuso al envío de instructores al estar ausentes BNG y ERC-- reclamó al Gobierno un calendario de retirada de las tropas españolas de Afganistán y atribuyó su intención de enviar un grupo de instructores al "síndrome compensatorio" por el repliegue de Irak. La misma postura defendió el portavoz de BNG, Francisco Rodríguez, quien además puso en duda la legitimidad del Gobierno presidido por Hamid Karzai y de la operación militar internacional.
Alonso replicó que la salida de Afganistán supondría el regreso del régimen talibán y de los niveles de "represión intolerables", además de que dejaría al país asiático de nuevo como un emisor de terrorismo y podría desestabilizar al vecino Pakistán.
Por su parte, el portavoz del Grupo Popular, Fernando López-Amor, reclamó al Gobierno "un reconocimiento explícito" de que las tropas españolas están en Afganistán en una guerra y exigió que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, acuda al Parlamento para pedir de nuevo la autorización parlamentaria para la citada operación porque sus cometidos actuales "sobrepasan lo autorizado" por la Cámara.
Tras definir la intervención de Alonso como de "encefalograma plano", reprochó al ministro que no aportara datos sobre la investigación sobre los autores del atentado que el pasado 24 de junio acabó con la vida de seis soldados en Líbano ni sobre el nivel de alerta en ese teatro de operaciones.
Alonso respondió al portavoz 'popular' tildándole de "mayúsculo imprudente" por pedirle en el Congreso información que puede comprometer una investigación, le emplazó a solicitarla en la comisión de secretos oficiales de la Cámara baja y le invitó a ponerse en contacto con su Departamento siempre que precise cualquier dato.
En respuesta a las críticas del portavoz 'popular' por no desplegar carros de combate en lugar de blindados BMR en Líbano , el titular de Defensa subrayó que la decisión es puramente militar y definió como "un disparate técnico" su petición. "Para darme a mí políticamente no utilicen a los militares", zanjó.
El ministro también replicó a las comparaciones entre Afganistán e Irak realizadas por López-Amor, quien aseguró que ambas operaciones están avaladas por Naciones Unidas, y recalcó que en Irak no existía terrorismo antes de la guerra y que el propio Federico Trillo, en una comparecencia de junio de 2003 ante la Comisión de Defensa del Congreso, definió Afganistán como una "misión de paz".
En relación a los distintivos de las medallas concedidas a militares fallecidos en misiones en el exterior, Alonso subrayó que el Gobierno otorgará el distintivo rojo a los fallecidos ayer tras haber cambiado el reglamento aprobado por el PP para otorgar la misma medalla a todas las bajas por acción hostil, poniendo fin a una inconsistencia jurídica "terrorífica" y una discriminación absurda intolerable.
