Alemania.- La película satírica sobre Hitler también encuentra rechazo entre los judíos alemanes

Actualizado: martes, 9 enero 2007 19:38

BERLÍN, 9 Ene. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Rosa Aranda) -

El judío Dani Levy, director de la comedia satírica 'Mi Fuehrer, la más verdadera historia sobre Adolf Hitler', que ha provocado un fuerte debate en Alemania, ha conseguido posicionar en su contra al Consejo Central Judío, la máxima autoridad semita en ese país.

El vicepresidente del Consejo Central Judío en Alemania, Dieter Graumann, cuya familia sufrió los efectos del Holocausto, ha dicho hoy al diario germano 'Journal Frankfurt', que le dan "fuertes dolores de estómago cuando se hace comedia el tema Hitler y del Holocausto".

Según Graumann, en la película se tergiversa la historia, pues "se quita importancia y minimiza" la cuestión. "No me puedo reír, porque cualquier tipo de risa se me atraganta en la garganta", añadió.

Desde hace días, la película que se estrena hoy en Alemania ha desencadenado un debate que pretende aclarar si es lícito o no burlarse del hombre que desencadenó la Segunda Guerra Mundial, pues para muchos el nombre del dictador no puede asociarse con ninguna forma de humor y la época del Holocausto no es lejana.

Varios críticos alemanes han rechazado la película por considerar que va en contra de los grandes esfuerzos que se han realizado en Alemania desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, para educar a la población en el rechazo del Nazismo y de los crímenes que se cometieron.

En la película, Hitler, protagonizado por el conocido humorista alemán Helge Schneidert, es mostrado en la pantalla como un hombre incapaz de guiar a su pueblo y al que el único camino que le queda es acudir a un judío para que éste "despierte la gran fuerza del Fuehrer", según explica en la película el ministro de Propaganda, Joseph Goebbels.

Con esta sátira Levy pretende arrebatar a los nazis "cualquier forma de credibilidad y grandeza". Por ello, Hitler es en 'Mi Fuehrer' alguien irrisorio, impotente, incompetente y llorón, que juega con barcos de guerra en la bañera y que sólo provoca la risa de sus espectadores.

La última gran producción cinematográfica sobre la figura de Adolf Hitler, 'El Hundimiento' de Bernd Eichinger, también hizo temblar los pilares alemanes, pues presentaba al dictador como un ser humano que es capaz de amar, sufrir y llorar junto a los suyos.