Bruselas destinará 1,8 millones para ayudar a recolocar a 512 trabajadores

Actualizado: martes, 31 agosto 2010 17:23


BRUSELAS, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea ha aprobado conceder 1,8 millones de euros del Fondo de Adaptación a la Globalización para ayudar a recolocar a 512 trabajadores del fabricante de semiconductores NXP en Países Bajos, que fueron despedidos como consecuencia de la crisis económica.

El Ejecutivo comunitario responde así positivamente a una solicitud de ayuda enviada por las autoridades holandesas que cubría a un total de 590 trabajadores que perdieron sus empleos por la caída de la estructura comercial internacional, según un comunicado de Bruselas.

La ayuda todavía debe ser ratificada por la Eurocámara y por los Veintisiete para liberar los fondos con los que se pretende financiar medidas para la reincorporación de los parados al mercado de trabajo, para el reconocimiento de la experiencia anterior y para la formación y el reciclaje.

El sector europeo de los semiconductores registró una importante caída en el mercado en los últimos cinco años (del 14,9% al 11,2%), lo que unido a la fortaleza del euro frente al dólar dejó en situación de desventaja a los fabricantes de la UE. Una situación que se vio agravada con la llegada de la crisis económica y financiera internacional, añade la nota.

El comisario de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión, László Andor, señaló que el sector de los semiconductores es un segmento "muy sensible" a las variaciones en el crecimiento económico que se ha visto "duramente afectado" por la crisis.

Por ello, Andor confió en que la ayuda del Fondo de Adaptación a la Globalización (FEAG) permita ofrecer "nuevas oportunidades" y "facilitar la transición a un nuevo empleo" mediante la formación y apoyo a los trabajadores despedidos.

El Fondo se creó a finales de 2006 para ayudar a las personas que han perdido su puesto de trabajo debido al impacto de la globalización y en junio de 2009 se revisaron sus normas para reforzar el papel del FEAG como instrumento de intervención rápida.

Bruselas estima que desde la puesta en marcha de este mecanismo se ha ayudado a más de 70.000 trabajadores que perdieron su empleo a causa de la crisis en algún Estado miembro.