TORONTO (CANADÁ), 17 (EP/AP)
El empresario canadiense-alemán, Karlheinz Schreiber, perseguido por la Justicia alemana por evadir impuestos en una operación de venta de armas, dijo ayer que no cooperará en la investigación sobre las presuntas actividades criminales del ex primer ministro canadiense, Brian Mulroney, si es extraditado a Alemania.
En declaraciones desde una cárcel de Toronto, Schreiber dijo que sería "imposible" para él participar en la investigación desde una cárcel alemana", según citó el periódico canadiense 'Globe and Mail'. Schreiber subrayó que si es extraditado no dirá "ni una sola palabra" sobre la investigación.
Estas palabras de Schreiber siguen al anuncio, el jueves, de la decisión de un tribunal canadiense de rechazar su última petición de permanecer en el país, aunque es probable que Schreiber recurra la decisión ante el Tribunal Supremo.
Schreiber ha sostenido en documentos judiciales que él pagó al ex primer ministro Mulroney 300.000 dólares canadienses en efectivo dentro de un acuerdo que fue ultimado en los últimos días de Mulroyne como primer ministro en 1993.
El actual primer ministro, Stephen Harper, ha anunciado una investigación oficial y sus opositores han presionado al Gobierno conservador para que evite su extradición a Alemania y pueda ser llamado a testificar.
El ministro de Justicia canadiense, Rob Nicholson, se ha comprometido a mantener a Schreiber en el país hasta el 1 de diciembre, pero ha rechazado decir si pospondrá su extradición a propósito de la investigación.
Mulroney, que fue primer ministro del Gobierno conservador desde 1884 hasta 1993, niega las acusaciones de Schreiber y ha dicho que debe haber una investigación oficial, ya que una investigación exhaustiva es la única manera de cerrar el asunto que le ha perseguido durante años.
Alemania acusa a Schreiber, que ostenta doble nacionalidad alemana y canadiense, de evadir el pago de 46 millones canadienses en impuestos. Los cargos contra él están relacionados con un trato de venta de tanques de guerra alemanes a Arabia Saudí.