NUEVA YORK, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones humanitarias que están operando en el este de Chad han reclamado el envío urgente de ayuda y un despliegue rápido de las fuerzas de pacificación de Naciones Unidas, pese a que los observadores internacionales persisten en que aún hay obstáculos para que se pueda llegar a completar tal despliegue.
Las agencias humanitarias, que ayudan a cientos de miles de refugiados procedentes de la región sudanesa de Darfur y del propio Chad, han insistido en las últimas semanas en las dificultades que padecen para llevar a cabo su trabajo.
Así, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) sostiene que la lucha armada entre la rebeldía chadiana y el Ejército alcanza en ocasiones a sus 12 campamentos de refugiados. El propio ACNUR ha acusado al Gobierno de Chad de no hacer los suficientes esfuerzos para detener estos enfrentamientos.
La rebelión también ha "distraído" al Ejército de Chad en su misión de proteger los 600 kilómetros de frontera con Sudán y frenar en ese punto los conflictos que, posteriormente, derivan en violencia dentro del país, según indican algunas asociaciones de cooperación.
"Nos han atacado al menos tres convoyes recientemente", señala el director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos, James Morris. "Hemos tenido a nuestra gente en peligro; nuestros alimentos están en peligro. Este es un lugar que es muy inseguro. Cuando pedimos a nuestro personas que ejecuten la distribución y transporte de alimentos, ponen sus vidas en peligro", abundó.
"La violencia se ha intensificado en Chad. Sé que nuestros convoyes están en peligro, y realmente necesitamos ayuda para que nos protejan. Las fuerzas de pacificación suelen ser algo beneficioso", dijo Morris.
Por su parte, la agencia británica Oxfam, que controla la gestión del agua y la ejecución de proyectos de saneamiento en el este de Chad, indicó a través de una declaración que "la prioridad debe ser dar" protección a los civiles.
"Por lo que cualquier fuerza internacional desplegada en Chad tendrá que dirigir sus esfuerzos a la seguridad de los refugiados sudaneses, los chadianos desplazados y las comunidades locales para acabar con los ataques sobre poblaciones civiles", dijo Oxfam.
"Las acciones para acabar con la violencia contra los civiles deben ser tomadas rápidamente y con decisión", reza la declaración.