China.- Reporteros Sin Fronteras protesta al presidente del COI por la falta de libertad de prensa en China

Actualizado: viernes, 30 noviembre 2007 10:52

BEIJING, 30 Nov. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Débora Altit) -

La organización Reporteros Sin Fronteras ha enviado una carta abierta al presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge, protestando por los últimos casos de acoso a periodistas ocurridos en China, a tan sólo nueve meses de la celebración de los Juegos Olímpicos y pese a las promesas lanzadas por el país asiático para hacerse con las Olimpiadas.

En la carta, firmada por el secretario general de RSF, Robert Menard, la organización protesta por los informes "extremadamente perturbadores" que están llegando desde China, que incluyen medidas como el plan de Beijing de crear archivos de todos los periodistas (unos 30.000) que viajen a la ciudad olímpica; si la conclusión del informe es negativa, los reporteros podrían ver rechazada su entrada al país, aun estando acreditados por su comité olímpico nacional.

El motivo de estos informes, según argumenta Beijing, es evitar la entrada de personas que supongan un riesgo para la seguridad de los Juegos y que entre la masa de informadores se cuelen "falsos periodistas".

"Otras ciudades olímpicas han creado archivos sobre los periodistas, pero fue por motivos organizativos y nunca con la intención de negar la entrada en función de criterios que todo el mundo debe darse cuenta que en el caso de Beijing son políticos", afirma Menard.

La carta abierta recuerda también que China ha puesto ya en marcha todo un operativo para impedir que organizaciones chinas o extranjeras aprovechen el interés mediático para manifestarse en la ciudad. "Los periodistas también podrían estar en el punto de mira de esta vigilancia preventiva, y es posible que cientos de personas vean impedida su entrada en China".

RSF denuncia, asimismo, que pese a las promesas realizadas por China y la nueva ley que rige, desde enero de este año, las actividades de los corresponsales extranjeros en el país, se han dado numerosos ejemplos de abusos, entre los que cita el caso de la corresponsal de la televisión suiza, Barbara Lüthi, detenida y golpeada recientemente junto con su cámara en la provincia de Hebei (norte) o la de una pareja de fotógrafos, también suizos, a los que la policía de Hubei (centro) también retuvo durante horas.

"Incluso más grave es el hecho de que los periodistas y disidentes chinos continúan cayendo víctimas de la represión", agrega Menard. Se calcula que en el país existe un centenar de periodistas o activistas detenidos.

"Señor Rogge, es su silencio el que, desafortunadamente, hizo todos estos abusos posibles", termina diciendo la carta, en la que se pide al presidente del COI una respuesta directa, al contrario de lo que ha ocurrido hasta ahora. "Un fracaso a la hora de superar este reto clava representará un enorme golpe en la historia del movimiento olímpico", concluye Menard.