BOGOTÁ, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ex ministro colombiano de Desarrollo Fernando Araujo asumirá próximamente la cartera de Exteriores casi dos meses después de que consiguiera escapar de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que le mantuvo secuestrado durante seis años y un mes.
El presidente, Álvaro Uribe, nombró esta tarde a Araujo nuevo canciller de Colombia en sustitución de María Consuelo Araujo --a pesar de tener el mismo apellido no son parientes--, quien esta mañana dimitió a raíz de que el pasado jueves la Corte Suprema de Justicia ordenara la detención de su hermano, el senador Álvaro Araujo, e iniciar una investigación contra su padre por sus presuntos vínculos con los grupos paramilitares.
Un comunicado emitido por la Presidencia informó del nombramiento y calificó al nuevo ministro "como un ciudadano reflexivo que ha sufrido en su propio ser la tragedia nacional del secuestro, en cuya superación estamos empeñados".
Araujo, quien fue ministro en el Gobierno de Andrés Pastrana, fue secuestrado la noche del 4 de diciembre de 2000 en la zona turística de Bocagrande, en Cartagena de Indias. El pasado 31 de diciembre escapó de un campamento del grupo armado más importante de Colombia en medio de un enfrentamiento entre los guerrilleros y tropas del Ejército y la Marina en los Montes de María (departamento de Bolívar).
Aprovechando el desconcierto de sus guardianes, se escabulló del campamento arrastrándose. El ex ministro sobrevivió cinco días deambulando sin agua ni comida por las montañas, esquivando a habitantes de la zona por miedo a que le delataran y entregaran a la guerrilla.
Araujo se guió en la selva colombiana siguiendo el trazo de un gasoducto hasta que llegó a San Agustín, un pueblo situado a unos 570 kilómetros al norte de Bogotá, desde donde pudo contactar con las autoridades.
"UN GRANITO DE ARENA"
Ahora, casi dos meses después, el presidente le ha ofrecido la cartera diplomática. En declaraciones a la emisora local 'RCN', Araujo explicó que Uribe le llamó el domingo por la noche para ofrecerle el puesto. "Le pedí que me dejara meditarlo al menos por la noche, lo conversé con mi familia que me brindó su apoyo, y temprano lo llamé para confirmarle", agregó.
Al ser preguntado sobre las acusaciones de corrupción, Araujo manifestó que no tiene cuentas pendientes con la Justicia porque los delitos que se le imputaban han caducado. No obstante, nunca aclaró estos cargos ante las autoridades judiciales.
Respecto a su nueva ocupación, se declaró dispuesto "a aportar un granito de arena" por el país y "deseoso de trabajar por esa nueva Colombia sin politiquería, sin paramilitares, sin guerrilla ni delincuencia, en la que todos podamos vivir en paz".
Tras recordar el drama de sus seis años de secuestro, el nuevo ministro de Exteriores manifestó que está "más obligado que cualquier otro" a poner sus esfuerzos para que "todas las gestiones del Gobierno tengan éxito".
