Cumbre UE.- Comienza la cumbre europea que tratará de cerrar un acuerdo final sobre el nuevo Tratado

Actualizado: jueves, 18 octubre 2007 21:52

Italia y Polonia son los últimos escollos para lograr un compromiso que ponga fin a 6 años de debate

LISBOA, 18 Oct. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Juan Sanhermelando) -

Los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete iniciaron hoy con media hora de retraso la cumbre que tratará de cerrar un acuerdo final sobre el nuevo Tratado de Reforma que sustituya a la fallida Constitución Europea. El objetivo es poner punto y final a seis años de ensimismamiento durante los que la UE ha estado absorbida por una crisis de identidad agudizada por el 'no' en los referendos de Francia y Países Bajos al Tratado constitucional en 2005.

El primer ministro portugués y presidente de turno de la Unión Europea, José Sócrates, dijo antes de iniciar los trabajos que los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete están "muy muy cerca" de un acuerdo final sobre el nuevo Tratado de Reforma que se llamará, según anunció, "Tratado de Lisboa". Admitió que "todavía quedan problemas" pero subrayó que son "limitados" y que la presidencia intentará resolverlos.

"Por supuesto que quedan todavía problemas. No hay ningún Consejo Europeo o ninguna Conferencia Intergubernamental sin problemas en la agenda, pero el alcance de los problemas es limitado", dijo Sócrates.

También el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, se mostró convencido de que "tendremos un consenso hoy o mañana sobre el Tratado de Reforma".

Pese a que predomina el ambiente optimista en todas las delegaciones, la batalla por el reparto de eurodiputados para la legislatura 2009-2014, que enfrenta sobre todo a Italia y España, podría acabar ensombreciendo la cumbre. A ello se suman otras reservas de Polonia, República Checa, Austria y Bulgaria.

Italia pide aprobar en Lisboa el Tratado de Reforma y aplazar la distribución de escaños al considerar que la propuesta aprobada por la Eurocámara le perjudica gravemente porque le hace perder la paridad con Francia y Reino Unido. El Gobierno de Roma considera además que el reparto debería haberse realizado en función del número de ciudadanos de cada país y no según las estadísticas de población residente que suministra la oficina estadística Eurostat.

El primer ministro italiano, Romano Prodi, dijo antes de empezar la cumbre que la presidencia portuguesa todavía no había presentado ninguna propuesta para resolver el tema, pero se mostró convencido de que la solución final será el aplazamiento.

En contraste, España exige que la decisión sobre el Tratado de Reforma se adopte al mismo tiempo que el reparto de escaños y espera recuperar 4 de los 14 puestos que perdió con el Tratado de Niza, hasta lograr 54. También la presidencia portuguesa pretende cerrar las dos cuestiones en Lisboa, mientras que el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, no ve ningún problema en aplazar la discusión sobre los eurodiputados para que no bloquee la adopción del Tratado.

La otra gran incógnita de la cumbre es Polonia, que reclama incluir en el Tratado un mecanismo de 'freno de emergencia' (el denominado 'compromiso de Ioannina') que permite a una minoría de países retrasar una decisión aunque no tengan suficientes votos para bloquearla. La postura polaca estará mediatizada por las elecciones que se celebran el próximo 21 de octubre y en las que se juega el puesto el primer ministro, Jaroslaw Kaczynski.

Tanto la Comisión como los Estados miembros han rechazado ya de plano la petición de República Checa de incluir en el Tratado de Reforma una disposición que permita a los Estados miembros exigir al Ejecutivo comunitario que retire una propuesta legislativa. Esta medida se inscribe en la solicitud checa de que no sólo sea posible transferir competencias de los Estados miembros a la UE sino también a la inversa.

Parecen en vías de solución las demandas de Austria y Bulgaria. Viena exige que el Tratado incluya una base legal que le permita limitar el número de estudiantes alemanes en sus facultades de Medicina, que en algunas supera la mitad del total de alumnos por ser más baratas. Todo apunta a que esta cuestión se resolverá en negociaciones con el Ejecutivo comunitario.

Por lo que se refiere a Bulgaria y a su reivindicación de escribir 'evro' en las traducciones al cirílico de los textos legales comunitarios pese a la oposición del Banco Central Europeo (BCE), el Ejecutivo comunitario ha señalado también que espera que este problema se resuelva "muy pronto".