LONDRES, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El máximo responsable de artificieros del Cuerpo Logístico Real del Ejército británico, el coronel Bob Seddon, ha presentado su dimisión y abandonará su cargo a partir del próximo mes de enero, informó el Ministerio de Defensa de Reino Unido.
La dimisión de Seddon está motivada, en parte, por su temor a que se retiren programas de entrenamiento destinados a la formación de artificieros que sean capaces de desactivar las bombas instaladas por insurgentes talibán afganos en los bordes de las carreteras por las que patrullan las topas británicas, y que son una de las principales causas de muerte entre los soldados desplegados en el país centroasiático, según fuentes de Defensa citadas por la cadena BBC.
En una entrevista que será emitida hoy por el programa Panorama, de la radiotelevisión pública británica, Seddon asegura que está preocupado por el impacto que está teniendo en su equipo la escasez de soldados entrenados para la desactivación de explosivos caseros. Además, expresa su temor por la larga duración de las rotaciones y por la ausencia de personal cualificado en el resto de unidades de élite del Ejército, aseguró BBC en su 'web'.
"Estoy muy preocupado por la posibilidad de que, a largo plazo, algunas de las personas que están realizando un trabajo extraordinariamente difícil y peligroso en Afganistán puedan pagar un precio psicológico demasiado alto", indica Seddon durante la entrevista.
Además, según BBC, el coronel defiende las medidas que ha promovido para formar un mayor número de expertos en la desactivación de explosivos, pero señala que serán necesarios al menos seis años para poder completar el entrenamiento de especialistas. "Eso significa que la cohorte actual (de soldados desplegados en Afganistán) va a continuar bajo una gran presión", añadió.
El Ejército británico ha comenzado a ofrecer remuneraciones de hasta 50.000 libras a los artificieros expertos que deseen embarcarse en la próxima rotación de soldados que será enviada a Afganistán, en un intento por aliviar las tensiones existentes entre las unidades que ya están desplegadas.
En declaraciones a BBC, el Ministerio de Defensa admitió que los periodos establecidos de descanso y la duración de las rotaciones se habían incumplido en Afganistán. "Desafortunadamente, durante un tiempo de alto compromiso operacional, se han incumplido los protocolos orientativos, pero estamos tomando medidas para resolver la situación".
