Expertos de la ONU admiten "razones para creer" que hubo violencia sexual en el ataque del 7 de octubre

Archivo - La representante especial del secretario general de la ONU sobre la Violencia Sexual en los Conflictos, Pramila Patten
Archivo - La representante especial del secretario general de la ONU sobre la Violencia Sexual en los Conflictos, Pramila Patten - Europa Press/Contacto/Luiz Rampelotto - Archivo
Actualizado: lunes, 4 marzo 2024 21:58

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Israel llama a consultas a su embajador ante la ONU y denuncia un intento de silenciar violaciones de Hamás

MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

La representante especial de la ONU sobre la Violencia Sexual en Conflictos, Pramila Patten, ha presentado este lunes un informe en el que recoge que hay "razones para creer" que durante el ataque del 7 de octubre hubo violaciones y otros maltratos crueles e inhumanos contra las mujeres.

La enviada de la ONU ha visitado Israel y los territorios palestinos ocupados entre el 29 de enero y el 14 de febrero acompañada de un equipo de nueve miembros. La propia Patten ha resaltado que esta visita "no tiene intención ni competencia para investigar".

Así, explica que no se han podido reunir con ninguna víctima de violencia sexual "a pesar de los esfuerzos coordinados para animarles a presentarse". En total han mantenido 33 encuentros con instituciones israelíes y han realizado entrevistas a 34 personas, incluidos supervivientes y testigos de los ataques del 7 de octubre, rehenes liberados y personal sanitario. También han examinado 5.000 fotografías y 50 horas de vídeo.

La información recopilada permite concluir que "hay motivos razonables para creer que hubo violencia sexual relacionada con el conflicto durante los ataques del 7 de octubre en múltiples lugares en torno a Gaza, tales como violaciones y violaciones en grupo en al menos tres ubicaciones": en el Festival de Música Nova, el kibutz Reim y la carretera 232. También se mencionan posibles casos de mutilación genital, desnudez y ataduras.

Sin embargo, Patten ha indicado que sobre las informaciones respecto a violencia sexual en el kibutz de Beri "muy difundidas en los medios de comunicación", han concluido que fueron "infundadas". En particular, se refiere a la noticia de un supuesto feto apuñalado aún dentro del útero de su madre.

Con respecto a los rehenes, el equipo de Patten ha encontrado "información clara y convincente de que se ha cometido violencia sexual, incluidas violaciones, torturas sexualizadas y maltratos crueles, inhumanos y degradantes". Además, ha advertido de que hay "motivos para creer que esta violencia podría seguir produciéndose".

El informe destaca que las limitaciones de la misión hacen imposible concretar con certeza que estos incidentes hayan sido perpetrados por miembros de Hamás, ya que podría haber también milicianos de otros grupos como Yihad Islámica e incluso civiles gazatíes infiltrados aprovechando el ataque.

De hecho, Patten ha destacado el "alto nivel de planificación" y preparación de los ataques, que buscaban "una campaña indiscriminada para matar, provocar sufrimiento y secuestrar al mayor número posible de hombres, mujeres y niños, soldados y civiles por igual, en el mínimo espacio de tiempo posible".

La misión de Patten también visitó Ramala, donde responsables palestinos les trasladaron información sobre "conductas problemáticas" de las fuerzas de seguridad israelíes. En concreto, se refiere a registros en controles de seguridad, amenazas de violación, detenciones y asaltos.

El informe concluye con una serie de recomendaciones, tales como que Hamás libere de forma inmediata e incondicional a los rehenes israelíes, que las partes presenten denuncias ante el Tribunal Penal Internacional (TPI) y que Israel colabore con la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos y otros organismos internacionales. También pide un alto el fuego humanitario inmediato y dar voz a las mujeres.

El informe provisional será entregado este mismo mes de marzo a las partes interesadas, que tendrán una semana para responder a estas acusaciones antes de que Guterres publique la versión definitiva, ya en abril.

REACCIÓN DE ISRAEL

Tras la publicación del informe, el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Israel Katz, ha anunciado que ha llamado a consultas al embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, tras acusar al organismo internacional de un "intento de silenciar" este documento.

Katz ha resaltado que se trata de un "grave" informe de expertos de la ONU que demuestra que los milicianos que irrumpieron el 7 de octubre desde Gaza en territorio israelí perpetraron agresiones sexuales.

"He ordenado a nuestro embajador ante la ONU, Gilad Erdan, que regrese a Israel para realizar consultas inmediatas sobre el intento de silenciar el grave informe de la ONU sobre las violaciones masivas cometidas por Hamás y sus colaboradores el 7 de octubre", ha publicado Katz en su cuenta en X, antes Twitter.

En particular, Katz reprocha al secretario general de la ONU, António Guterres, que no haya convocado al Consejo de Seguridad "a la vista de las conclusiones para declarar a Hamás organización terrorista e imponer sanciones a sus partidarios". "Nuestras hijas no son pródigas. Quien les hayan hecho daño, pagarán", ha remachado.

El propio Erdan ha subrayado que el informe "reconoce los crímenes sexuales perpetrados el 7 de octubre durante la matanza de Hamás", aunque recuerda que ha tardado cinco meses en hacerlo. La publicación del informe "deja al descubierto la vergüenza de la ONU", que "no ha convocado ni una sola discusión sobre esta cuestión, ¡ni una sola reunión!".

Erdan ha advertido así que un alto el fuego solo serviría para "prolongar el sufrimiento de los rehenes". "Cualquier llamamiento a un alto el fuego es un apoyo flagrante a Hamás para que siga con su violencia sexual", ha destacado.

Por todo ello, pide al secretario general, António Guterres, y al Consejo de Seguridad que "condenen de inmediato a Hamás por sus crímenes".

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