El grupo insurgente Hezb-i-Islami rechaza el plan de paz ofrecido por Karzai

Actualizado: miércoles, 12 mayo 2010 13:21


KABUL, 12 May. (Reuters/EP) -

El grupo guerrillero afgano Hezb-i-Islami ha rechazado el borrador de la propuesta de paz ofrecida por el presidente del país, Hamid Karzai, que proponía a los líderes insurgentes exiliarse a terceros países en un intento por poner fin a la guerra de nueve años, según declaró este miércoles uno de sus miembros.

El partido Hezb-i-Islami, liderado por el ex primer ministro Gulbuddin Hekmatyar, que dirige una insurgencia separada de los talibán contra las fuerzas de la OTAN, aseguró que la oferta es "totalmente inaceptable y fuera de consideración". Un responsable del partido y miembro del equipo que inició una ronda inicial de conversaciones de paz directas con Karzai el pasado mes de marzo, Qareeb Rahman Saeed, aseguró que el grupo aún insiste en fijar un calendario de retirada para las tropas extranjeras antes de comenzar cualquier conversación.

"La única forma de salir de este embrollo es la retirada total e incondicional del país de los ocupantes extranjeros en un calendario razonable que ya ha ofrecido por la dirección del partido", aseguró Saeed. "Cualquier otra propuesta diferente a ésta no será razonable ni justificable", añadió.

El borrador del Gobierno afgano, que fue distribuido a algunos diplomáticos y al que tuvo acceso Reuters el pasado fin de semana, también prevé que los talibán corten sus vínculos con la red terrorista Al Qaeda y que se unan a la corriente política como parte de cualquier acuerdo de paz.

La OTAN considera a Hezb-i-Islami, cuyo líder fue un destacado cabecilla guerrillero que luchó contra los soviéticos durante la década de los ochenta del siglo XX, como uno de los tres mayores grupos insurgentes de Afganistán.

Esta facción armada ha luchado desde hace años contra fuerzas de la OTAN y del Gobierno central afgano en el este y en algunas zonas del norte del país. En el pasado este grupo reconoció públicamente compartir objetivos con los talibán, pero siempre mantuvieron su autonomía con respecto a ellos. De hecho, en los últimos meses se han registrado incursiones talibán en territorios controlados por este grupo.

El borrador pretende dar un empuje a la reintegración de los insurgentes y ofrece puestos de trabajo que serán financiados por los países donantes. Este documento aparece semanas antes de que se celebre la asamblea de paz nacional o 'jirga', que comenzará en la capital, Kabul, el próximo 29 de mayo y en la que se debatirá cómo integrar a los insurgentes en un acuerdo de paz.

"Los participantes de la 'jirga' deberían tener libertad para decidir el futuro del país. Si el Gobierno de Karzai quiere anunciar las decisiones de la 'jirga' antes de que se produzca la reunión, entonces, ¿cuál será el significado de la misma?", indicó. "Será tiempo desperdiciado, dinero desperdiciado y una deshonra para sus participantes", prosiguió.

El plan del Gobierno no ha dado más detalles sobre la oferta de asilo, pero Arabia Saudí, que en el pasado facilitó al menos una ronde de conversaciones entre el Gobierno afgano y algunos ex dirigentes talibán, es visto como un lugar posible donde podrían exiliarse los líderes de la oposición.