MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha aprovechado su presencia en la conferencia de paz sobre Libia que se celebra en Berlín para recordar la "desastrosa situación humanitaria" que viven los civiles como consecuencia del conflicto armado.
"Más de 220 colegios de Trípoli están cerrados, con lo que 116.000 niños se han visto privado de su derecho humano fundamental a una educación. Los migrantes y refugiados, atrapados en centros de detención cerca de los combates, también han resultado afectados y siguen sufriendo unas consecuencias horrosas. Esta terrible situación no puede seguir así", ha argumentado.
Así, ha reiterado que no hay una solución militar para Libia y ha advertido de que este caso es un recordatio de las peligrosas consecuencias que tiene una gurra civil total. "Además una guerra civil supone un riesgo de desestabilizar toda la región del sur del Mediterráneo y del Sahel, agravando las amenazas de terrorirsmo, tráfico de seres humanos, tráfico de droga y contrabando de armas", ha indicado Guterres.
Además Guterres ha acogido con satisfacción el alto el fuego apoyado por las partes y les ha pedido "participar de buena fe en un diálogo sobre cuestiones políticas, económicas y militares en un proceso liderado por libios, propiedad de los libios y que sea incluyente", una iniciativa que contará con el apoyo de la ONU.
"Estaremos con el pueblo libio en su trabajo para resolver sus diferencias con el diálogo y el compromiso, de buena fe, (...) para cartografiar una vía hacia un futuro más pacífico", ha explicado Guterres.
El mariscal y 'señor de la guerra' Jalifa Haftar y Fayez Serraj, primer ministro del Gobierno de Trípoli, el único reconocido por la comunidad internacional, son los principales protagonistas de la cita de Berlín, en la que podría acordarse un alto el fuego que detenga la ofensiva de Haftar sobre la capital libia, lanzada en abril de 2019.
