JARTUM, 28 Feb. (EP/AP) -
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, llegó hoy a Sudán para entrevistarse con el presidente de este país, Omar al-Bashir, en plena presión internacional contra los dos regímenes, el uno por su programa de enriquecimiento de uranio y el otro por su presunta implicación en las matanzas de Darfur.
Ahmadineyad fue recibido en el aeropuerto de Jartum por Al Bashir. Durante su estancia de dos días en Sudán, el mandatario persa pronunciará un discurso en una institución privada de la capital y será testigo de la firma de varios acuerdos bilaterales, según informó el Ministerio sudanés de Información.
El fiscal del Tribunal Penal Internacional (TPI), Luis Moreno Ocampo, acusó ayer formalmente a un antiguo ministro de Estado sudanés encargado de la Seguridad en Darfur, Ahmed Mohamed Harun, y al líder de las milicias paragubernamentales 'janjaweed', Alí Mohamed Alí Abd-al-Rahman (alias 'Alí Kashib'), de crímenes de guerra y crímenes contra la Humanidad contra la población civil de esta región del oeste de Sudán.
Se trata de la primera vez que un tribunal internacional acusa al Estado sudanés de tener vínculos con las milicias paramilitares. El ministro de Justicia sudanés, Mohamed Alí Al Mardi, ya ha rechazado estas acusaciones y ha advertido de que Harun no va a ser extraditado para su procesamiento.
La ONU está presionando a Sudán para que acepte una fuerza de interposición de 22.000 efectivos de Naciones Unidas y la Unión Africana en Darfur, donde desde 2003 han muerto más de 200.000 personas y más de 2,5 millones han huido de sus hogares a causa del conflicto. Al Bashir se opone a esta fuerza por considerarla una violación de su soberanía.
Por otra parte, los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, junto a Alemania están, están debatiendo en estas fechas el agravamiento de las sanciones impuestas el pasado mes de diciembre contra Irán por negarse a interrumpir su programa de enriquecimiento de uranio.
Estados Unidos acusa a Irán de estar intentando fabricar en secreto armas atómicas. Teherán asegura que el único objetivo de este programa nuclear es la generación de energía eléctrica para uso pacífico.
