KABUL, 7 (Reuters/EP)
Al menos diez policías han muerto en los enfrentamientos que se han producido en las últimas horas con los talibán en la provincia de Wardak, en el centro de Afganistán.
La hostilidades se desataron el sábado por la noche (hora local) cuando los insurgentes asaltaron el distrito de Sayed Abad, en Wardak. Allí han prendido fuego un edificio gubernamental y han matado al jefe de la Policía local y a otros nueve agentes, según fuentes policiales.
Los combates han continuado el domingo, provocando el cierre de la carretera que conecta Kandahar y Kabul y problemas en el suministro eléctrico que han afectado también a las provincias de Logar, Ghazni y Paktia, de acuerdo con la cadena afgana Tolo News.
Los talibán aseguran que se han hecho con el control de todo el distrito, dejando numerosas bajas entre los uniformados y adueñándose de armas y munición. Las autoridades denuncian que han saqueado casas de civiles y han destruido los nuevos puestos de control colocados en la zona.
Fuentes gubernamentales han asegurado a Reuters que al menos 25 talibán han muerto en los choques y que han llegado refuerzos de otras provincias para repeler la ofensiva. Según estas mismas fuentes, las tropas afganas han recuperado la carretera entre Kandahar y Kabul.
El portavoz del Gobierno de Ghazni, Mohammad Arif Noori, ha contado además que al menos un soldado ha muerto impidiendo que los combatientes afganos pasaran a esta provincia vecina. Los talibán atacaron Ghazni en agosto en su mayor ofensiva desde la toma de Kunduz, en 2015. Fuerzas afganas apoyadas por Estados Unidos los expulsaron dejando un saldo de cientos de muertos, incluidos 95 civiles.
