MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de soldados de las Fuerzas Armadas de Camerún abrió fuego el pasado miércoles contra varios civiles en la región Noroeste del país, dejando al menos nueve muertos, incluida una niña de poco más de un año, según ha dado conocer este martes el Ministerio de Defensa.
En un comunicado de la cartera de Defensa del que se ha hecho eco el diario 'Journal du Cameroun', un grupo de cuatro soldados acudió a la localidad de Missong en busca de un compañero desaparecido. Ya durante la noche, el destacamento se topó con un grupo de ciudadanos "irritados" y, en lo que el Ministerio ha descrito como una respuesta inapropiada, abrieron fuego contra ellos.
El Ministerio de Defensa ha remarcado que en todo momento los soldados actuaron en defensa propia, aunque han lamentado que la respuesta fuera inadecuada a las circunstancias, así como apresurada y contraria al principio de precaución sobre el uso de armamento.
Como resultado de este "error", nueve aldeanos fallecieron, entre los que se encuentran cuatro hombres, otras cuatro mujeres y una niña de poco más de un año. Además, otra bebé de menos de un año ha resultado levemente herido y trasladado a un hospital de la zona.
El ministro de Defensa, Joseph Beti Assomo, ha lamentado lo ocurrido y ha enviado sus condolencias a las familias de las víctimas. Por su parte, los soldados implicados en el incidente han sido detenidos.
Las regiones anglófonas de Camerún --Noroeste y Suroeste-- se han visto sacudidas por el conflicto a raíz de la represión de los movimientos separatistas tras la autoproclamación de la independencia de Ambazonia el 1 de octubre de 2017.
El año anterior, esta zona --otrora parte de las colonias británicas en África pero que decidieron unirse al Camerún francés-- fue escenario de protestas pacíficas para reclamar una mayor autonomía o la independencia argumentando una discriminación por parte de las autoridades centrales, también en temas de idioma.
Desde entonces, los grupos armados han proliferado y el apoyo a los separatistas, hasta entonces bastante marginal, se ha visto acrecentado. El Gobierno ha respondido mediante una dura represión, durante la que las organizaciones de Derechos Humanos han acusado a las fuerzas de seguridad de cometer atrocidades.
