Una multitud mata al presunto asesino de una familia y le cuelga de un poste

Actualizado: viernes, 30 abril 2010 21:00


MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

Una multitud encolerizada ha matado a palos y a puñaladas al presunto asesino de una familia en la localidad libanesa de Ketermaya, al sureste de Beirut, antes de arrastrar por la calle su cadáver, atado a un coche, desnudarlo y colgarlo de un poste eléctrico.

Según informa este viernes el periódico 'Daily Star', las Fuerzas de Seguridad Interna arrestaron a Mohamad Salim al Msalem, de nacionalidad egipcia, hace dos días, después de registrar su casa de Ketermaya (en la región de Chouf) por sospechar que había matado a Yusef Abu Merhi, su esposa Kawthar y sus nietas Amina, de siete años, y Zeina, de nueve.

Los medios de comunicación libaneses afirmaron que en la casa de Al Msalem se había hallado un cuchillo ensangrentado sobre un montón de ropa. Después, Al Msalem fue trasladado a una comisaría de Policía donde confesó haber cometido los crímenes.

Pero cuando este jueves lo llevaron a la casa de la familia asesinada para que explicase cómo habían ocurrido los hechos, Al Msalem se vio rodeado por un grupo de vecinos que gritaban "¡Tienen al asesino! ¡Venganza, venganza!".

Cientos de vecinos irrumpieron en la vivienda y algunos comenzaron a golpear a Al Msalem mientras otros les jaleaban diciendo "¡Pegadle, lapidadle". En un principio, las fuerzas de seguridad no pudieron intervenir debido al gran número de personas que había, pero luego realizaron varios disparos al aire para dispersar a la multitud y metieron al hombre en una ambulancia, según el diario.

Sin embargo, los vecinos lograron sacar a Al Mslaem de la ambulancia y le mataron a palos y a puñaladas mientras aún estaba esposado. Después ataron su cuerpo a un coche y lo arrastraron por la calle para luego desvestirlo y colgarlo de un poste eléctrico.

"EL VEREDICTO DE DIOS"

Algunas de las personas reunidas en torno al cadáver hicieron fotografías mientras otras coreaban eslóganes y recitaban versos del Corán. Además, pidieron a los periodistas presentes que se marchasen y no hiciesen fotos.

"¿Vais a presentar al criminal como un héroe mientras nos ponéis a nosotros como criminales y asesinos? Estamos implementando el veredicto de Dios, y esto es lo menos que podemos hacer", dijo una de las personas a los reporteros.

Un vecino de Ketermaya, Mohamad Abu Merhi, justificó la reacción de la gente. "No olviden el horror del crimen que ha cometido. Nadie puede impedir que los vecinos se comporten así, no culpen a la gente por su reacción", declaró.

Pero el ministro del Interior y de Municipios, Ziyad Baroud, condenó el asesinato de Al Msalem y lamentó que los vecinos de Ketermaya hayan utilizado "medios distintos a los procedimientos judiciales" para castigar a un presunto asesino y que lo hayan hecho "antes de que se revelasen todos los detalles sobre los crímenes".