WASHINGTON, 31 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó este martes que espera que "en cuestión de semanas" Naciones Unidas apruebe un nuevo paquete de sanciones contra Irán que ha acordado junto al presidente francés, Nicolás Sarkozy.
Obama y Sarkozy, en una rueda de prensa conjunta en la Casa Blanca, dejaron claro que en su opinión es el momento de imponer sanciones más duras que las que en los últimos tiempos se han estado negociando con China, Rusia, Alemania y Reino Unido, los otros países involucrados en este asunto.
"Espero que tengamos esto listo (la imposición de las nuevas sanciones contra Irán) para primavera, afirmó Obama, que recalcó que espera que estas disposiciones sean efectivas "en cuestión de semanas".
Estas palabras, además, se producen poco después de que el Gobierno chino, que durante meses se mostró contrario a imponer más sanciones a Teherán, haya mostrado recientemente una mayor predisposición a castigar con mayor severidad los supuestos intentos de Teherán de conseguir la bomba atómica.
Por su parte Sarkozy afirmó que "ha llegado el momento de tomar decisiones" con respecto a Irán. El presidente afirmó que junto con la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro británico, Gordon Brown, "realizaremos todos los esfuerzos necesarios para que Europa como conjunto apoye las sanciones contra Irán".
Según afirmó Obama, las consecuencias a largo plazo de que Irán posea armamento nuclear son inaceptables, y sostuvo que la Repúiblica Islámica ha rechazado todos los intentos de encontrar una solución diplomática a la inquietud que genera entre buena parte de la comunidad internacional el desarrollo de su programa nuclear.
Aún así, el mandatario estadounidense no dejó de tender su mano en caso de que Teherán decida rectificar su política. "La puerta sigue abierta, en caso de que los iraníes se decidan a dar el paso (de ajustarse a las exigencias internacionales)", afirmó Obama.
Estados Unidos y sus aliados quieren imponer sanciones a Irán porque según ellos este país pretende desarrollar su programa nuclear para hacerse con armamento atómico. Se trata de una acusación negada por Teherán, que afirma que sólo pretende desarrollar su programa nuclear con fines civiles.