SANÁ, 20 Oct. (Reuters/EP) -
Investigadores de la ONU han denunciado este jueves que el ataque aéreo llevado a cabo en octubre por la coalición liderada por Arabia Saudí contra un funeral en Saná, la capital de Yemen, supone una violación del Derecho Internacional.
Según la ONU, "el segundo ataque constituye una violación del Derecho Internacional por parte de la coalición, que no tuvo en cuenta que los objetivos se encontraban desarmados". La organización ha señalado que los ataques, que tuvieron lugar el 8 de octubre, se saldaron con 140 muertos y cientos de heridos.
"El segundo ataque, que tuvo lugar entre tres y ocho minutos después del primero, provocó más muertos. Entre ellos estaban los civiles que habían acudido a ayudar a evacuar a los heridos que dejó el primer ataque", ha comunicado el grupo de supervisión, que ha recomendado al Consejo de Seguridad a instar a la coalición a que deje de utilizar ataques dobles como parte de sus ofensivas.
Según el informe publicado por la organización, la coalición "no puso en marcha las medidas de precaución necesarias para minimizar el número de víctimas civiles". El ministro de Asuntos Exteriores de Arabia Saudí, Adel al Jubeir, ha señalado que el Gobierno estaba siendo lo más cuidadoso posible para no violar el Derecho Internacional, y que aquellos responsables del bombardeo sufrirán las consecuencias.
La coalición comenzó a enfrentarse a los rebeldes huthis en marzo de 2015. Según la ONU, el expresidente yemení Ali Abdulá Salé acudió al funeral con uno de sus hijos, pero abandonó la ceremonia antes de que se produjeran los ataques, que podrían haber supuesto "un golpe político y militar devastador para los aliados del expresidente".
El grupo de supervisión del Consejo de Seguridad ha acusado en anteriores ocasiones a la coalición, así como a los rebeldes huthis, de violar el Derecho Internacional y vulnerar los Derechos Humanos en Yemen.
