MADRID 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha pedido este jueves que se abra una investigación "independiente y transparente" sobre el fallecimiento del preso palestino Arafat Jaradat, muerto el pasado sábado cuando se encontraba en poder de las fuerzas de seguridad israelíes, según un comunicado de la ONU.
"Debe iniciarse una investigación transparente e independiente sobre las circunstancias que rodearon la muerte del señor Jaradat y los resultados de la misma tienen que ser hechos públicos tan pronto como sea posible", ha declarado Ban.
De igual modo, Ban ha destacado la necesidad de "encontrar urgentemente una solución para los presos palestinos en Israel, cuyo estado de salud se ha deteriorado dramáticamente como resultado de su prolongada huelga de hambre".
Asimismo, el diplomático de la ONU ha indicado que "2013 será un año decisivo para la solución de los problemas entre ambos Estados", en referencia a Israel y Palestina.
"Jerusalén tiene que convertirse en la capital de los dos Estados", ha declarado Ban, en un mensaje leído en su nombre durante el seminario sobre Asistencia al Pueblo Palestino, que ha empezado este jueves en Roma. Esto sólo se logrará "a través de negociaciones", ha añadido en su mensaje, leído por el asistente de la Secretaría General de Política Exterior, Óscar Fernández Taranco.
El secretario general ha afirmado que "ambas partes deben cumplir con su compromiso de resolver estos y otros temas centrales, entre los que se incluyen el territorio, la seguridad, los asentamientos y el agua".
Ban ha recalcado que "la viabilidad de las instituciones palestinas se encuentra en arenas movedizas políticas y su futuro está estrechamente ligado a que se logre una solución por parte de los dos Estados". "Las partes deben abstenerse de toda acción que socave la reanudación de las negociaciones", ha proseguido el mensaje del diplomático.
El diplomático de Naciones Unidas ha expresado su consternación por los asentamientos de Israel en Cisjordania, incluido el este de Jerusalén. Una actividad ilegal que incumple el Derecho Internacional y supone "cada vez mayores impedimentos" a una solución pacífica y eventual del conflicto.