Varsovia, 16 Oct. (Reuters/EP) -
La primera ministra polaca, Ewa Kopacz, ha anunciado después de la cumbre europea celebrada este jueves que su país enviará alrededor de 70 guardias fronterizos a Hungría para ayudar al país a proteger la frontera con Serbia.
Hungría se ha visto forzada a afrontar la mayor crisis de refugiados que vive Europa desde la Segunda Guerra Mundial y, a pesar de las críticas de sus socios, hace unos meses concluyó la construcción de un valla en Serbia para controlar la entrada de refugiados en el país.
En nueve meses, Hungría ha denunciado la entrada irregular de más de 204.000 personas, que no poseían los pasaportes y visados requeridos. Esto supone trece veces más llegadas que las registradas en el mismo periodo de 2014.
Como consecuencia de la construcción de la valla, el flujo de inmigrantes procedentes de Serbia ha descendido marcadamente.
"Estamos enviando cinco vehículos altamente cualificados con dispositivos de visión nocturna (a Hungría), con equipamento, lo que permitirá vigilar completamente la frontera (con Serbia)", ha afirmado Kopacz esta mañana en declaraciones recogidas por la agencia estatal polaca 'PAP'.
"Adicionalmente, estamos enviando otros vehículos menos especializados, y alrededor de 70 guardias fronterizos", ha añadido.
De acuerdo con PAP, Kopacz también afirmó que Polonia estaba preparada para incrementar la ayuda a Frontex, la Agencia Europea para la Gestión de las Fronteras Exteriores. En concreto, la primera ministra polaca hacía referencia al envío adicional de 40 guardias fronterizos, además de los 40 que ya había asignado anterioremente a la institución.
Los Estados miembro, tras varios meses de negociación, aprobaron el pasado mes un plan de cuotas que planificaba el reparto de 120.000 solicitantes de asilo entre las fronteras de los Veinticho. Hungría, junto con Eslovaquia y la República Checa, se opusieron a este programa comunitario de reparto.
