KIEV, 13 Jul. (Reuters/EP) -
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, ha ordenado este lunes a los servicios de seguridad y a la Policía que desarmen a los "grupos ilegales", asegurando que amenazan con desestabilizar aún más un país que combate a los separatistas en el este.
Poroshenko ha explicado que el enfrentamiento de este fin de semana entre los miembros de un grupo de extrema derecha y la Policía en la ciudad de Mukacheve, cerca de la frontera con Hungría, Eslovaquia y Rumanía, fue simplemente una lucha territorial sobre las rutas de contrabando.
Pero parecía que el presidente se ha dirigido a Sector Derecha, el cual ha jugado un importante papel en las protestas que derrocaron al entonces presidente, Viktor Yanukovich, el año pasado, argumentando que ninguna fuerza política en Ucrania debería operar células armadas ni ejecutar "células criminales".
El grupo nacionalista de extrema derecha pidió la dimisión del ministro de Interior el fin de semana después de que dos de sus miembros fueran asesinados en un tiroteo con la Policia de Mukacheve, donde se dice que fueron atacados por el cuerpo armado. Sin embargo, el Ministerio de Interior ha asegurado que el grupo disparó primero.
Poroshenko ha dicho en un comunicado que se llevará a cabo una firme investigación sobre los eventos y que el Ministerio de Interior, los servicios de seguridad y otros agentes del orden deben desarmar a "todos los grupos armados ilegales".
"Ninguna fuerza política debería tener y no tendrá ningún tipo de célula armada", ha advertido Poroshenko. Además, dijo la semana pasada que el flujo de armas del conflicto con los separatistas prorrusos en el este incrementó el riesgo de que se produjeran serios crímenes en Ucrania, donde la corrupción ha florecido bajo la mirada de Yanukovich y donde las autoridades son criticadas por no reformar el sistema judicial lo suficientemente rápido.
El presidente ucraniano ha dado un paso al admitir que no ha hecho suficiente por combatir la corrupción: "Debemos llegar al fondo de la cuestión... Hablo de los clanes, el contrabando, la corrupción y casos similares". Este lunes la situación está más calmada en Mukacheve pero no está claro si el Sector Derecha, tanto aclamado como culpado por impulsar la violencia en las protestas de Maidan del año pasado, ha abandonado las armas según lo exigido por la Policía.
El grupo derechista ha defendido su derecho a tener armas, diciendo que debe proteger a Ucrania de los intentos por hacerla fracasar de la nueva política del Gobierno y de las "fuerzas externas", principalmente de Rusia, para desestabilizar el país.
No obstante, las autoridades han cuestionado la necesidad de que la gente en la zona oeste del país tenga armas, a miles de kilómetros de la frontera este, donde la guerra ha matado a más de 6.500 personas y forzado a más de 1,5 millones a abandonar sus hogares.
