LISBOA 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un niño de 9 años murió este sábado en la región de Oporto, en el centro de Portugal, tras caerle encima un árbol que fue arrancado por el fuerte viento que está azotando el país, que se encuentra en gran parte en alerta por el temporal.
Los hechos ocurrieron en la localidad de Paredes, según informa 'Jornal de Noticias', cuando el pequeño estaba jugando al fútbol con sus amigos. El menor fue trasladado de inmediato al hospital de Vale do Sousa, donde falleció.
Entretanto, la Autoridad Nacional de Protección Civil (ANPC) informó de que levantará a las 21.00 horas de hoy la alerta naranja sobre el país y no a medianoche como estaba previsto tras los últimos datos ofrecidos por el Instituto de Meteorología que apuntan a una cierta estabilidad, según informa la agencia Lusa.
Previamente, la ANPC había recomendado a la población en el norte y el centro del país que permanecieran en sus casas ante los fuertes vientos que golpearon hoy Portugal y que habían hecho que se declarara la alerta roja en esta parte del país. Según este organismo, entre las 0.00 y las 15.00 horas se registraron 3.687 incidentes en todo el país debido al mal tiempo, unos dos mil de ellos provocados por la caída de árboles.