El primer ministro asegura que investigará lo sucedido

Actualizado: jueves, 3 febrero 2011 16:27

MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro egipcio, Ahmed Shafiq, pidió nuevamente "perdón" por la violencia contra los manifestantes contrarios al presidente Hosni Mubarak y aseguró que ha ordenado que se investigue la muerte de manifestantes en los enfrentamientos de la pasada noche y que los resultados de la investigación serán difundidos públicamente.

Asimismo, calificó de "inaceptable" que los "extranjeros" le digan a Egipto lo que debe hacer y manifestó que Estados Unidos, un país con "200 años de historia", no tiene derecho a dar consejos "a los herederos de 7.000 años de historia".

"Teniendo en cuenta el deber de las autoridades y del Estado de proteger a sus hijos, me siento obligado a pedir perdón otra vez y a asegurar que estos hechos no volverán a ocurrir", declaró Shafiq durante una rueda de prensa. "Voy a investigar lo sucedido y prometo que se publicarán los resultados", agregó.

A juicio del primer ministro, estos hechos "no se superarán fácilmente" y han dañado "la reputación del país en el resto del mundo". Asimismo, estimó que los incidentes se han debido, fundamentalmente, "a la falta de seguridad".

"No hay suficientes policías sobre el terreno para garantizar la seguridad del país", afirmó. "Me comprometo a restaurar el orden en las instituciones del Gobierno", prosiguió. "Los que me conozcan sabrán que estoy dispuesto a ir, ahora mismo, a la plaza Tahrir", aseveró.

El primer ministro admitió desconocer quiénes estuvieron detrás de estas agresiones a los manifestantes y precisó que las personas que aparecieron el miércoles en la plaza Tahrir montadas en camello se habían declarado "indignadas porque los manifestantes habían destruido sus casas, pero no sabemos nada".

7.000 AÑOS DE HISTORIA

En la rueda de prensa, el primer ministro se negó a responder a las preguntas de la cadena de televisión Al Arabiya y se mostró muy crítico con Estados Unidos. "Países que tienen 200 años de historia nos dicen a nosotros lo que debemos hacer, a los herederos de 7.000 años de historia", declaró.

"Eso es inaceptable", agregó. "Que los extranjeros nos digan a nosotros que Mubarak debe dimitir es algo inaceptable", añadió. "Aunque yo esté enfadado con mi padre, nadie tiene derecho a pedirme que le dé una patada", comentó.

"El fin de la Presidencia de Mubarak debe hacerse con dignidad, pero algunas personas quieren que se repita el ejemplo tunecino", agregó. "Quieren que suceda lo que sucedió en Túnez", insistió. "Hay una cosa que se llama 'ética'", declaró (en inglés).

Respecto a la fuga de capitales por parte de magnates vinculados al Partido Nacional Democrático, de Mubarak, el primer ministro declaró: "Si se trata de su dinero, tienen derecho, pero si es dinero del Estado, es un crimen".