Pyongyang rechaza responsabilidades por el barco que cargó petróleo en un puerto controlado por federalistas

Actualizado: jueves, 13 marzo 2014 2:15

SEÚL, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Corea del Norte ha negado este jueves cualquier responsabilidad por el petrolero norcoreano que atracó en el puerto de Es Sider, controlado por grupos federalistas, para cargar petróleo, y ha argumentado que el mismo, pese a tener su bandera, opera bajo órdenes de una empresa egipcia.

Pyongyang ha indicado que el petrolero ha violado sus leyes y un contrato existente con dicha compañía, que tiene su sede en la localidad de Alejandría, al llevar un cargamento de contrabando, por lo que ha notificado a Libia y a la Organización Internacional Marítima que rompe todos sus lazos con el barco.

"Así, el barco no tiene nada que ver con Corea del Norte en estos momentos y el país no tiene responsabilidad de ningún tipo hacia el mismo", ha dicho la Administración Marítima de Corea del Norte a través de un comunicado, publicado por la agencia estatal norcoreana de noticias, KCNA.

En el mismo, ha especificado que el contrato, firmado finales de febrero con la empresa egipcia Golden East Logistics, permitía a la misma usar el petrolero durante un periodo de seis meses. Además, ha dicho que la empresa rechazó sus demandas para que abandonara el puerto de Es Sider sin el cargamento de petróleo.

La Marina libia ha perdido este miércoles el contacto con el petrolero y sospecha que ya ha entrado en aguas territoriales egipcias, según ha reconocido el portavoz del Ejecutivo, Habib al Amin.

El carguero fue visto por última vez cerca de Marsa Matruh, una localidad egipcia situada cerca de la frontera. Al Amin ha explicado, a la luz de estos acontecimientos, que el buque no había quedado inutilizado por los disparos realizados el martes por efectivos de la Armada.

El buque había logrado cargar el crudo el fin de semana en la terminal de Es Sider y abandonar el martes este puerto, situado en la parte este de Libia. Su huída motivó una nueva votación contra el primer ministro, Ali Zeidan, que terminó siendo destituido y ahora parece buscar refugio en Europa.

Las autoridades libias han pedido a los países de la zona colaboración para detener al barco, cuyas actividades han puesto de manifiesto el escaso control que tiene Trípoli en áreas de la parte este tomadas por milicias rebeldes.