Los republicanos creen que la apuesta de Obama por las energías limpias subirá los precios

Actualizado: miércoles, 16 junio 2010 9:57

WASHINGTON, 16 Jun. (Reuters/EP) -

Destacadas figuras del Partido Republicano de Estados Unidos han reaccionado al discurso del presidente Barack Obama pronunciado este martes (madrugada del miércoles en España) criticando su apuesta por las energías limpias y por medidas como la prorrogación de la moratoria a la explotación de nuevos yacimientos petrolíferos submarinos.

En su opinión, estas políticas encarecerán los precios de la energía, lo que provocará que muchas empresas abandonen Estados Unidos y se destruyan miles de puestos de trabajo en todo el país.

El líder de los republicanos en la Cámara de Representantes, John Boehner, cree que Obama no debería aprovecharse de la crisis originada por el vertido de petróleo en el golfo de México para crear un impuesto energético a escala nacional destinado a familias y pequeñas empresas que considera "letal para el empleo".

Boehmer afirmó que demócratas y republicanos han de trabajar juntos para encontrar soluciones "responsables" a la catástrofe ecológica generada por del derrame de petróleo en el golfo de México. "No hay nada responsable o razonable en crear un impuesto nacional para la energía que incrementará los precios de la energía y destruirá empleos", sostuvo.

Por su parte, el senador republicano por Louisiana, el estado más afectado por el vertido, David Vitter, afirmó estar "decepcionado" por la negativa de Obama a levantar la moratoria sobre la apertura de nuevos yaciminetos petrolíferos submarinos en las costas de Estados Unidos, pues afirmó que dicha postura está empezando a afectar a la "tambaleante economía de la costa (del Golfo)".

Por su parte, un destacado miembro republicano del Comité para los Recursos Naturales del Congreso, Doc Hastings, sostuvo que en este momento la prioridad del Gobierno ha de ser detener el vertido que afecta a la costa sur de Estados Unidos.

Sin embargo, afirmó que dicha circunstancia no podía ser usada por el Gobierno como pretexto para aprobar una nueva normativa de pagos por la emisión por parte de las empresas de gases de efecto invernadero que pondrán los precios de la energía "por las nubes" y que provocarán la deslocalización de numerosas empresas.

En su discurso de este martes, Obama criticó la "adicción" de Estados Unidos a los combustibles fósiles, ya que afirmó que el país consume el 20 por ciento de estos materiales a escala global y sólo produce el dos por ciento.

Así, el presidente hizo un llamamiento a la implantación masiva en Estados Unidos de energías limpias, y reafirmó su apuesta por el establecimiento de cupos de emisión de gases de efecto invernadero por los que las empresas habrán de pagar como método eficaz para la lucha contra el cambio climático.