MOSCÚ, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, afirmó que no cree necesarias las organizaciones supranacionales de regulación de la cooperación energética, en clara referencia a la Carta de la Energía, uno de los puntos de discrepancia de cara a la formalización de un nuevo Acuerdo de Asociación y Cooperación entre Rusia y la UE.
"Nuestra cooperación se basará en los acuerdos firmados en la cumbre del G-8 de San Petersburgo. No es necesario crear organismos supranacionales", afirmó Lavrov tras reunirse hoy en Moscú con representantes de Alemania, Francia y Reino Unido.
Estaba previsto que Rusia y la UE negociaran un nuevo acuerdo de cooperación el pasado 24 de noviembre en Helsinki, pero el veto de Polonia motivado por el embargo ruso a la carne polaca y la negativa de Moscú a firmar la Carta de la Energía impidieron que se celebrara la reunión. El actual Acuerdo de Asociación y Cooperación entre Rusia y la UE entró en vigor el 1 de diciembre de 1997 y expirará en diciembre de 2007.
La Carta de la Energía es un acuerdo de cooperación energética entre Europa Oriental y Occidental firmado en La Haya en 1991 que garantiza a los inversores el libre acceso al petróleo, el gas y los oleoductos y gaseoductos rusos.
Lavrov subrayó que el presidente ruso, Vladimir Putin, no se opone a los puntos principales de la Carta y que Rusia los respeta y acata, pero algunos de sus mecanismos, sobre todo los referentes a las inversiones y al tránsito, son inaceptables.
El ministro ruso apuntó además que algunas de las sanciones previstas en la Carta de la Energía podrían ser aplicadas a países que obstaculizan el tránsito de recursos energéticos rusos en su camino hacia Europa. "Algunos países firmantes de la Carta de la Energía están obstaculizando los suministros rusos. Por consiguiente, otras partes del tratado podrían imponerles sanciones como medida disciplinaria", apuntó.
