MADRID, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Rusia ha negado este viernes estar detrás del bombardeo llevado a cabo el jueves en la provincia siria de Idlib (norte), que se ha saldado con al menos 44 muertos y que el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha achacado a aviones militares rusos.
"Todos los informes del Observatorio para los Derechos Humanos en Siria, radicado en Londres, y de los Cascos Blancos sobre un supuesto ataque de un avión ruso realizado en la localidad de Zardana, en la provincia de Idlib, no corresponden a la realidad", ha dicho el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
En el mismo, ha resaltado que en los últimos días se registraron enfrentamientos entre el grupo Frente Fatá al Sham --antiguo Frente al Nusra-- y Yeish al Ahrar, según ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik.
El Observatorio ha detallado que entre las víctimas mortales hay seis niños y ha agregado que otras 60 personas han resultado heridas. En este sentido, no ha descartado que aumente el número de fallecidos, debido a que varias se encuentran en estado crítico.
La región de Idlib, en el noroeste de Siria, sigue siendo la zona más poblada del país en manos de los rebeldes que luchan contra el Gobierno de Bashar al Assad.
En los últimos años, decenas de miles de combatientes y de civiles han buscado refugio allí o han sido trasladados desde otras partes del país --en el marco de acuerdos de evacuación-- a medida que el Ejército ha ido recuperando terreno con el apoyo de Rusia e Irán.
