Rusia teme que los cambios en la cúpula de la oposición siria busquen apoyo para una intervención occidental

MOSCÚ 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha expresado este lunes sus reservas ante los últimos cambios en la dirección de la oposición siria y teme que la preponderancia de las personalidades contrarias a la negociación con el régimen de Bashar al Assad busque incrementar el apoyo a una intervención militar de Estados Unidos y sus aliados.

"Están surgiendo nuevos datos que estamos verificando de que algunos seguidores de la oposición están empezando a formar una nueva estructura integrada por quienes han abandonado la Coalición Nacional porque no creen en las negociaciones", ha afirmado Lavrov, según recoge la agencia de noticias RIA Novosti.

Esta reorganización de la oposición amenaza la continuidad de las negociaciones iniciadas hace unas semanas en Ginebra (Suiza) para lograr una solución política a la guerra. Con estos cambios, según Lavrov, la oposición parece aspirar de nuevo a una victoria militar sobre el régimen de Al Assad siguiendo el ejemplo de la revuelta contra Muamar Gadafi en Libia.

Rusia permitió la aprobación en el Consejo de Seguridad de una resolución para la instauración de una zona de exclusión aérea sobre Libia, pero más tarde, criticó las acciones militares de Estados Unidos y sus aliados que en la práctica apoyaron el avance de las milicias insurgentes y el derrocamiento de Gadafi.

Por otra parte, Lavrov ha advertido de que cualquier resolución del Consejo de Seguridad para el envío de ayuda humanitaria a Siria que no cuente con la autorización del Gobierno sirio supone una violación del Derecho Internacional y de la soberanía nacional del país.

Mientras, el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, ha hecho público un comunicado en el que defiende la postura de la delegación del régimen de Al Assad en los contactos de Ginebra y su intención de dar relevancia al "terrorismo" en las mismas.

Así, ha rechazado responsabilizar solo a una de las partes del fracaso de la segunda ronda de contactos. El Gobierno de Al Assad tiene "toda la justificación" para abordar la lucha "antiterrorista" como máxima prioridad en los contactos, según un comunicado recogido por la agencia de noticias Reuters.

En ese sentido, destaca la "intención positiva" de la delegación gubernamental en los contactos de Ginebra. El enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Lajdar Brahimi, "no debería inclinarse y realizar acusaciones unilaterales que culpan a un solo bando de la paralización del diálogo".