NAIROBI, 15 Feb. (EP/AP) -
El fiscal general de Kenia, Vincent Wohoro, retiró hoy los cargos imputados a un empresario que financiaba a la Unión de Tribunales Islámicos (UTI) en Somalia, acusado de inmigración ilegal.
El empresario, Abukar Omar Aden, de 72 años, fue imputado junto a su hijo, Omar Abukar Omar, los cuales fueron arrestados a principios de mes cuando intentaban cruzar la frontera entre Somalia y Kenia, después de que la UTI se viera perseguida fuera de la capital somalí, Mogadiscio, por las tropas somalíes y etíopes el pasado mes de diciembre, perdiendo así el control de gran parte del país que recuperó el Gobierno de transición somalí, hasta entonces exiliado en la localidad de Baidoa.
En un principio, las autoridades kenianas tenían previsto deportar a ambos hombres de vuelta a Somalia, pero el fiscal general apeló al Tribunal Supremo de Kenia alegando la situación de persecución a la que se verían enfrentados ambos hombres, por lo que instó al Tribunal a permitir su salida del país con destino a Arabia Saudí, donde tienen su residencia.
Tras perder el recurso de apelación que presentó, Wohoro retiró los cargos por inmigración ilegal y ambos hombres fueron puestos en libertad.
Por su parte, Aden, en silla de ruedas tras sufrir un accidente de coche en 2002, reconoció haber financiado y brindado ayuda a la UTI, aunque Aden desvinculó a los islamistas somalíes de la red terrorista de Al Qaeda.
