BANG LANG DAM (TAILANDIA), 12 (EP/AP)
El primer ministro tailandés, Surayud Chulanont, pidió hoy a las comunidades musulmanas y budistas del sur de Tailandia, donde existe una insurgencia islámica cada vez más violenta, que trabajen juntas para restaurar la confianza mutua.
Desde enero de 2004, la insurgencia ha sido la causante de más de 2.300 muertes, repartidas igualmente entre musulmanes y budistas. Las bombas y los tiroteos desde coches son comunes en la región. Mientras los musulmanes acusan a las tropas gubernamentales de llevar a cabo asesinatos extrajudiciales, el Gobierno señala que los insurgentes están asesinando civiles tanto musulmanes como budistas para fomentar el conflicto en las provincias sureñas de Yala, Pattani y Narathiwat.
"Existe un sentimiento de desconfianza y recelo entre musulmanes y budistas en esta región. Deben ayudarse mutuamente para construir una confianza trabajando juntos", comentó Surayud durante una visita a Yala, donde unos 100 soldados están acampados para proteger la reserva.
Más del 10 por ciento de los cerca de 65 millones de tailandeses son musulmanes y principalmente se concentran en las provincias del sur donde conforman la mayoría de la población. Los musulmanes han estado quejándose durante mucho tiempo de que se sienten tratados como ciudadanos de segunda clase.
Surayud, en el poder desde un golpe de Estado el 19 de septiembre de 2006, prometió instaurar la paz en el sur como una prioridad y cambiar las políticas de línea dura de su predecesor, Thaksin Shinawatra, que favoreció un enfoque militar y rechazó las negociaciones pacíficas.
Aun así, el Gobierno declaró hoy que no tenía planes inmediatos para mantener conversaciones con los insurgentes musulmanes, o negociar la autonomía de alguna zona en especial. "El Gobierno no tiene semejante idea (para una autonomía). En Tailandia, la misma ley debe ser impuesta en todas partes igual", manifestó el primer ministro.
En los últimos actos de violencia, los presuntos insurgentes dispararon mortalmente ayer a una pareja de ancianos budistas desde una motocicleta en un mercado del distrito de Rangae, en Narathiwat, según el policía Noranit Srisuk. Así mismo, el capitán de Policía, Wanchai Non-orn, informó de que fue encontrado ayer el cuerpo de un hombre sin identificar que había sido disparado y quemado en el distrito de Yi Gno, también en Narathiwat.