BANGKOK 16 Feb. (EP/AP) -
Malasia será país que ejercerá de mediador en las negociaciones entre el Gobierno tailandés y los insurgentes musulmanes del sur del país, según informó hoy el primer ministro tailandés, Surayud Chulanont.
Surayud dijo que el Gobierno tailandés acordó "en principio" que las negociaciones deben comenzar, pero añadió que no hay por el momento planes concretos sobre la fecha del comienzo ni qué grupos rebeldes en concreto estarán incluidos en las negociaciones destinadas a acabar con los tres años de conflicto que han dejado al menos 2.000 muertos.
"Hemos discutido y acordado (Tailandia y Malasia) que debe haber negociación", explicó Surayud. Ayer, el ministro de Exteriores malasio, Syed Hamid Albar, señaló que su Gobierno está preparado para facilitar las negociaciones con la insurgencia islámica, si el Gobierno tailandés se lo pedía.
La Organización Unida para la Liberación de Pattani (provincia al sur de Tailandia), grupo separatista que vive exiliado en Suecia, recientemente mostró también su disposición a la negociación con el Gobierno si Kuala Lumpur actuaba como mediador. Los analistas creen este grupo tiene relación con algunos de los insurgentes que llevan a cabo ataques en el sur de Tailandia, pero no tienen control sobre ellos.
Tiroteos y atentados con bomba se registran casi a diario en las tres provincias de mayoría musulmana de Tailandia: Pattani, Yala y Narathiwat. En el último atentado registrado hoy, seis policías fronterizos resultaron heridos y dos soldados heridos de gravedad cuando dos bombas situadas en arcenes explotaron en la provincia de Yala.
Además, dos agentes de alto rango del Ejército fueron brevemente retenidos por aldeanos locales en Yala, en protesta por la presencia militar en la zona, aunque 50 efectivos consiguieron recatarlos sin mayor problema.
El Gobierno de Surayud ha dado la vuelta a las políticas de hierro empeladas por su predecesor en el cargo, Thaksin Shinawatra. El nuevo dirigente ha abogado desde que tomó posesión en octubre de 2006 por usar medios pacíficos para poner fin a la violencia, proporcionando más justicia y desarrollo para las minorías musulmanas y con la oferta de negociación con la insurgencia.