ESTRASBURGO, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El grupo Identidad, Tradición y Soberanía (ITS), formado por eurodiputados de siete países de la UE que lo definen "de derechas" y "nacional", corre el riesgo de desaparecer, debido al cruce de acusaciones entre una de sus componentes, la italiana Alexandra Mussolini, y sus cinco representantes rumanos al hilo de la crisis en Italia por los crímenes presuntamente cometidos por ciudadanos de Rumanía. De momento, dos de los cinco miembros rumanos de esta formación han presentado su dimisión, dejando en 21 componentes un grupo que, para seguir existiendo, no puede estar por debajo de 20.
Los eurodiputados rumanos Eugen Mihaescu y Petre Popeanga comunicaron ayer por la noche al presidente del Parlamento Europeo, Hans Gert Pottering, su decisión de abandonar el ITS e ingresar en el grupo de los No Inscritos de la Eurocámara. Fuentes parlamentarias indicaron que, de momento, los otros tres eurodiputados de esta nacionalidad también miembros del grupo de extrema derecha se mantienen dentro de sus filas.
Por otra parte, Mussolini también habría expresado su decisión de abandonar el grupo, algo que de momento no es formal todavía, según indicaron las fuentes, que la cuentan aún dentro del ITS.
El origen de las dificultades por las que atraviesa este grupo son las declaraciones que hizo Mussolini --nieta del dictador italiano-- como consecuencia de la criminalidad, presuntamente obra de rumanos, que vive Italia. Afirmó que "romper la ley se ha convertido en un modo de vida para los rumanos" que, en su opinión, deberían ser considerados "ciudadanos indeseables".
El partido rumano Romania Mare --xenófobo, antihúngaro y antigitano--, adscrito al ITS, reaccionó llamando "fascista" a Mussolini y recordando que sus orígenes familiares plantean muchas dudas acerca de sus valores democráticos.
De momento, la polémica se ha saldado con la salida de dos de los 23 eurodiputados que forman este grupo, rozando, con 21 miembros, el límite mínimo que fija el reglamento del Parlamento Europeo para la constitución de un grupo político, 20. En caso descender de esta cifra, el ITS se desintegraría y sus miembros restantes pasarían a formar parte del grupo de los No Inscritos.
No obstante, fuentes parlamentarias apuntaron la posibilidad de que pueda sumarse un eurodiputado polaco y previeron que, en cualquier caso, el líder del ITS, el francés Bruno Gollnisch, explique este martes qué está ocurriendo en este grupo.
La adhesión de Rumanía y Bulgaria el 1 de enero de este año permitió reunir el número suficiente de eurodiputados para la creación del grupo ITS apenas unos días después, el 10 de enero de 2007, puesto que estos dos países aportaron seis de los 20 miembros de que lo componían en un principio.
Según definió entonces en rueda de prensa Gollnisch, el ITS defiende los valores cristianos, la familia tradicional y la herencia y cultura de la civilización europea. Entre sus principios figuran la defensa de los "intereses nacionales", "soberanías, identidades y diferencias", así como "libertades y derechos heredados por todos", respeto del Estado de derecho y oposición a una Europa "unitaria, burocrática y a un super-Estado europeo" Componen el ITS siete eurodiputados franceses de Frente Nacional; cinco rumanos del partido Romania Mare; tres belgas de los independentistas flamencos del Vlaams Belang; dos italianos, entre ellos la nieta de Mussolini; un austriaco, del FPÖ de Haider; un británico independiente y un búlgaro de Attack.
LA UE NO NECESITA NEOFASCISTAS
Preguntado acerca de la posibilidad de que desaparezca este grupo de la Eurocámara, el jefe en el Parlamento del Partido Socialista Europeo (PSE), Martín Schulz, dijo hoy en rueda de prensa que es "una noticia estupenda" porque "a Europa le hacen falta muchas cosas, pero un grupo de neofascistas por supuesto que no".
Schulz consideró que "desde el primer día estaba claro para todos que la unión de los ultranacionalistas no podía funcionar a nivel político", porque existen entre ellos "diferencias totalmente contradictorias", como cree que ha quedado patente en el enfrentamiento entre Mussolini y la delegación rumana.
El líder socialista criticó que, por el contrario, sí tienen un "interés común", que consiste en "crear un grupo para aprovechar los fondos de los contribuyentes con los que poder perjudicar a la UE".
