La UE pide a Irak colaboración con la deportación de migrantes ilegales

Archivo - Migrantes procedentes de Irak en la frontera entre Grecia y Turquía.
Archivo - Migrantes procedentes de Irak en la frontera entre Grecia y Turquía. - Ahmed Deeb/dpa - Archivo
Publicado: martes, 20 julio 2021 19:23

BRUSELAS, 20 Jul. (EUROPA PRESS -

La Unión Europea ha reclamado este martes a Irak su colaboración para la devolución de migrantes que cruzan ilegalmente al bloque desde Bielorrusia, una práctica que viene denunciando desde hace semanas las autoridades lituanas.

En un contacto por videoconferencia, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha trasladado al primer ministro iraquí, Mostafá al Kazemi, sus condolencias por el ataque terrorista contra un mercado de Bagdad que se saldó con 35 muertos. "La UE apoya a Al Kazemi en temas de seguridad y combatir al extremismo", ha señalado Michel en un apunte en Twitter.

A renglón seguido, Michel ha hecho hincapié en que la cooperación en cuestiones migratorias es un punto clave de las relaciones entre Bruselas y Bagdad, después de que ambos dirigentes hayan tratado el flujo de migrantes iraquíes a la UE.

Lituania ha denunciado que al menos 1.500 personas, principalmente iraquíes, han llegado este año a su territorio desde Bielorrusia, al que acusa de instrumentalizar a los migrantes para responder a las sanciones europeas contra la deriva autoritaria de Alexander Lukashenko.

Fuentes comunitarias explican que Michel ha expresado de primera mano su preocupación por esta tendencia y ha pedido a Irak que se comprometa para tomar "acciones firmes" a este respecto. El ex primer ministro belga ha pedido explícitamente mejorar la cooperación con la UE para facilitar el retorno y readmisión de migrantes irregulares, en el marco del acuerdo de cooperación de Irak con el bloque europeo.

Irak es junto a Gambia y Bangladesh uno de los tres primeros países señalados por la Comisión Europea por su falta de colaboración en la deportación de migrantes. En consecuencia, Bruselas ha propuesto restringir al menos durante seis meses las condiciones para conceder visados de corta duración, una medida de presión para que las autoridades de estos países faciliten la readmisión de migrantes.

Se trata de la primera vez que Bruselas pone en práctica esta iniciativa desde que la UE modificó su código de visados para vincular esta política al nivel de cooperación en materia migratoria de los países de origen y tránsito de las rutas irregulares.

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