MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, viajará el próximo 15 de junio a Varsovia para discutir con las autoridades polacas cuestiones relativas al futuro del Tratado constitucional, que Polonia no ha ratificado, según informaron hoy fuentes gubernamentales.
La visita de Zapatero se producirá un día antes de su viaje a Berlín, donde ha sido invitado por la canciller alemana, Angela Merkel, cuyo país ostenta la presidencia de turno de la UE este semestre, para discutir sobre el Tratado constitucional de cara al debate que los Veintisiete mantendrán en el Consejo Europeo de junio, en el que se quiere dar una solución a la crisis planteada por los 'noes' francés y holandés al texto.
Polonia es uno de los países que no ha ratificado el tratado actual y uno de los que más obstáculos están planteando en la negociación que la presidencia alemana está manteniendo con todos los países miembros para alcanzar un acuerdo sobre un nuevo texto y fijar un calendario para su ratificación y entrada en vigor.
El presidente y el primer ministro polacos, los hermanos Lech y Jaroslaw Kacynski, quieren que el nuevo texto mantenga el sistema de voto que fija el Tratado de Niza y no parecen dispuestos a ceder en esta cuestión. Asimismo, reclaman que se dejen muy claras cuáles son las competencias exclusivas nacionales.
El encuentro del presidente del Gobierno con los responsables polacos se enmarca en los contactos que éste inició esta semana con distintos dirigentes europeos para acercar posturas de cara al Consejo del 21 y 22 de junio en Bruselas.
Ayer, Zapatero se entrevistó con el primer ministro holandés, Jan Peter Balkenende, cuyo país tampoco ha ratificado el Tratado constitucional tras rechazarlo en referéndum. Éste defiende que se dé un mayor papel a los Parlamentos nacionales, pero según indicaron hoy las citadas fuentes, no parece que vaya a suponer un gran obstáculo en la negociación.
Hoy hizo lo propio con el nuevo presidente de la República francesa, Nicolas Sarkozy, con quien tuvo ocasión de acercar posiciones y comprobar que los dos países están de acuerdo en que se deben mantener las principales aportaciones del texto actual, si bien el mandatario francés aboga por un "tratado simplificado" mientras que Zapatero defendió hoy un "tratado básico" que recoja la "sustancia" del actual.
