MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
Katrina Dawson, una de las víctimas mortales del secuestro en una cafetería de Sídney el pasado 15 de diciembre durante 16 horas, murió como consecuencia de un disparo de la Policía en el tiroteo que mantuvo con el atacante, Man Haron Monis.
La investigación policial ha precisado que el impacto de la bala no se habría producido directamente sino por un rebote de una bala perdida en medio del intenso tiroteo que mantuvieron las fuerzas de seguridad cuando irrumpieron en la cafetería de Martin Siege.
La causa de la muerte de Dawson, de 38 años, será determinada definitivamente cuando finalice la investigación sobre lo ocurrido, según ha informado el diario 'The Sidney Morning Herald'.
Los testigos relataron que Dawson, abogada de profesión, habría fallecido al intentar proteger a una amiga que estaba embarazada. La otra víctima fue el encargado de la cafetería, Tori Johnson, que murió ejecutado por Monis después de que intentase arrebatarle el arma al pensar que el secuestrador estaba dormido.
El secuestro de 17 personas durante unas 16 horas por el falso clérigo Monis, que obligó a colocar una bandera islámica en el local, conmocionó a la sociedad australiana, que según su propio primer ministro, Tony Abbott, no había sufrido un acto terrorista en más de 35 años.
