Actualizado: miércoles, 19 julio 2017 19:02

DAKAR, 19 Jul. (Thomson Reuters Foundation/EP) -

Unas 165.000 personas tienen necesidades humanitarias urgentes debido a la escalada de violencia en la provincia de Pool, en el sureste de Congo, según han alertado este miércoles el Gobierno y Naciones Unidas en un comunicado conjunto.

Las Fuerzas Armadas pusieron en marcha en abril un operativo militar en Pool para sofocar la revuelta liderada por el pastor Ntumi, antiguo enemigo del actual presidente, Denis Sassou Nguesso, durante la guerra civil de 1997.

Desde entonces, se calcula que unas 165.000 personas dependen de la ayuda humanitaria y que otras 50.000 han tenido que abandonar sus hogares para escapar de la violencia.

Naciones Unidas ha llamado la atención en particular sobre el riesgo de violencia sexual. Las denuncias de violaciones de los Derechos Humanos por parte de los militares se han multiplicado desde el inicio de las hostilidades.

Sin embargo, el coordinador humanitario de la ONU Anthony Ohemeng Boamah ha advertido de que la situación podría ser aún peor, ya que ocho de los trece distritos que forman Pool son prácticamente inaccesibles por los combates.

"Hay peligro de que la situación humanitaria se agrave por los conflictos y desplazamientos en República Centroafricana y en República Democrática del Congo", ha añadido Boamah.

La creciente inseguridad en la región ha dificultado el acceso a la educación, a la sanidad y a los alimentos. Los índices de malnutrición han comenzado a crecer a medida que los enfrentamientos han arrasado los campos de cultivo, de acuerdo con las agencias de la ONU que han visitado la zona.

"Esperamos que haya la atención suficiente para abordar la situación en Pool y que no se deteriore más", ha confiado Boamah. Naciones Unidas y el Gobierno de Congo han pedido 23,7 millones de dólares para ayuda de emergencia.

Más noticias

Leer más acerca de: