MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, señaló hoy que el objetivo de que España entre el G-8 de los países más desarrollados no forma parte de sus prioridades y acusó a su predecesor en el cargo, José María Aznar, de lanzar dicho objetivo "a bombo y platillo" sin resultado alguno.
"Creo que la experiencia nos debe servir. Cada presidente debe aprender de las experiencias que ha habido antes y recuerdo que hubo un presidente del Gobierno, el anterior, que se planteó como objetivo entrar al G-8. Lo lanzó a bombo y platillo y luego, no sé si hubo frustración por parte de alguien, pero desde luego creo que tenemos que ser cautos en una materia", afirmó Zapatero en rueda de prensa conjunta con el primer ministro de Italia -uno de los países que forman el G-8--, Romano Prodi.
Sin embargo, el jefe del Ejecutivo hizo hincapié en que no rechaza de plano la posibilidad de que España entre algún día en este selecto grupo. "No rechazo nada. Simplemente digo que en estos momentos no forma parte de los objetivos prioritarios del Gobierno porque las cosas, si han de producirse, se producirán de manera natural", explicó.
Zapatero aseguró que tiene "muchísimo" respeto por lo que representa el G-8 y dejó claro que España ya está entre los ocho primeros países "en cuanto a fuerza económica, de creación de economía en el conjunto del mundo y del orden internacional".
El presidente del Gobierno se refirió a este asunto en una entrevista concedida al diario italiano 'Corriere della Sera' este fin de semana y en la que indicó que España no pediría ahora su entrada en el G-8 pese a que supera a Canadá como octava economía mundial. "No lo pediremos. Estamos tranquilos donde estamos. Quizá hoy el mundo necesite mirar más allá del G-8 para afrontar los grandes problemas, como las enormes desigualdades y las consecuencias del cambio climático. Ocho países son pocos", explicó al citado periódico.
