Güímar (Tenerife) expresa a la delegada del Gobierno su malestar por la extracción ilegal de áridos en el municipio

Áridos De Güímar
GÜÍMAR/EP
Actualizado: miércoles, 31 marzo 2010 18:15

Rafael Yanes confía en que la visita de Carolina Darias sea un paso para la recuperación de los barrancos de la localidad

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -

La delegada del Gobierno en Canarias, Carolina Darias, visitó hoy las zonas afectadas por la extracción ilegal de áridos en el municipio de Güímar, siendo acompañada por el alcalde, Rafel Yanes, el subdelegado del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, José Antonio Batista, y varios ediles municipales.

En una nota de prensa, el Ayuntamiento de Güímar informó de que Carolina Darias pudo comprobar de cerca las consecuencias de lo que se el Consistorio considera uno de los mayores atentados paisajísticos de Canarias, hoyos de casi cien metros de profundidad que amenazan a los cultivos y a los terrenos colindantes. Varios agricultores le mostraron la situación en la que se encuentran sus fincas, la mayoría a punto de derrumbarse por culpa de estas excavaciones ilegales.

Por su parte, el alcalde de Güímar agradeció la disponibilidad tanto de la delegada como del subdelegado a la hora de aceptar su invitación para conocer de cerca las consecuencias que ha traído para el municipio cuarenta años de extracciones ilegales e incontroladas. Yanes dijo confiar en que esta visita sea un paso para que la recuperación y restauración de los barrancos de Güímar se convierta en un problema que competa a todas las administraciones.

El alcalde recordó que en abril de 2008 el Ayuntamiento logró precintar la última cantera que continuaba extrayendo áridos en el municipio, poniendo fin así a años de lucha contra el mayor atentado paisajístico de Canarias. "Se trata sin duda, asegura el alcalde, de una victoria para todos los vecinos de Güímar, que han visto cómo su belleza natural desaparecía bajo sus pies", añadió.

Por otra parte, Yanes señaló que no sólo es necesario restaurar el paisaje y hacerlo productivo para la agricultura, ya que lo más grave es la peligrosidad que representa el hecho de que los cauces públicos no estén delimitados, lo que significa una gran indefensión ante posibles lluvias torrenciales. En este sentido, afirmó que la Autopista del Sur supone una barrera artificial que no está debidamente planificada ante avenidas, pues los 16 pontones construidos en su base para encauzar el agua de lluvia no se corresponden con las zonas más bajas de los barrancos.