SANTA CRUZ DE TENERIFE, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una correcta y rápida actuación por parte de las personas que son testigos de un accidente de tráfico es vital para lograr una eficaz intervención de los servicios de emergencia, especialmente del sanitario, minimizar los daños sufridos y aumentar la supervivencia de los heridos.
Así lo ha indicado el Servicio de Urgencias Canario (SUC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, que ha recordado en una nota los primeros pasos que deben dar los intervinientes con el fin de prestar la mejor actuación posible ante un accidente.
Según el SUC, las preguntas que realiza el operador del 1-1-2 al alertante son vitales para dar la mejor asistencia posible al accidentado, ya que el ciudadano se convierte en "los ojos y las manos" del SUC hasta la llegada de los recursos de emergencia.
En este sentido, son precisamente los datos del alertante los que facilitan al personal del 1-1-2 a identificar el tipo y el número de recursos sanitarios más adecuado a la situación y el lugar en el que se ha producido el incidente.
A su vez, el primer paso que se debe dar cuando se presencia un accidente de tráfico es detenerse en un lugar seguro para valorar la situación, pero siempre cerciorándose de no correr riesgos a la hora de actuar y de no generar otros peligros añadidos.
Posteriormente, hay que llamar al 1-1-2 para darles toda la información que demanden con el fin de lograr una rápida localización del incidente, prestando especial atención al nivel de conciencia y su nivel de movilidad del afectado, y seguir las indicaciones del médico para prestarle la primera asistencia.
Además, si el accidente ha tenido lugar en una autopista o autovía, el SUC considera muy importante conocer el sentido en el que circulaban los vehículos, ya que ello podrá mejorar el tiempo de llegada de los recursos de emergencia.
Por otro lado, cuando el afectado se encuentra atrapado es recomendable apagar el contacto del vehículo y, si no hay riesgo, permanecer junto a él para trasmitirle tranquilidad mientras se espera la llegada de los recursos de emergencias, y nunca se debe dar de comer o beber a la víctima de un accidente.
No obstante, es muy importante vigilar su evolución para percatarse si el afectado puede hablar sin dificultad o si se encuentra somnoliento o pierde la conciencia, informando de cualquier cambio al médico coordinador del SUC por si fuera necesario tomar algún tipo de medida complementaria.
En el caso de que el accidente le haya producido al afectado alguna contusión, esguince o fractura en alguna extremidad, hay que inmovilizar la zona afectada y mantenerla elevada.
Para intervenir en un accidente de tráfico, el SUC considera fundamental mantener la calma y transmitírsela a la persona accidentada, seguir las indicaciones prestadas mediante teleasistencia por el SUC y esperar a la llegada de la ayuda especializada.
