SANTA CRUZ DE TENERIFE, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
Sólo 215 votos han impedido a Coalición Canaria (CC) conseguir su quinta diputada por la isla de La Palma al Parlamento regional en detrimento de los socialistas en el recuento del voto exterior efectuado ayer, que únicamente contabilizó los aproximadamente 9.500 votos adicionales que hasta el viernes pasado la Junta Electoral Central había descartado por haber llegado después del 31 de mayo a Canarias. El Partido Socialista Canario (PSC) celebró la "ratificación" de los resultados obtenidos en las islas el 27 de mayo pero los nacionalistas no dan por perdido el asunto.
CC ha solicitado a la Junta Electoral y a Correos la certificación de unos 700 votos procedentes en Cuba y Venezuela que el organismo electoral considera "extemporáneos" porque llegaron a España a partir del 28 de mayo, por lo que considera que fueron emitidos fuera de plazo. Con las certificaciones, CC quiere probar que su llegada tardía "no significa que fueran emitidos fuera de tiempo", lo que "podría" dar un vuelco a los resultados.
El secretario de Organización del PSC, Manuel Armas, aseguró que los resultados de hoy "han hecho justicia" ante las "sospechas más que fundadas en la emisión y tramitación del voto exterior" que guarda su partido, que aún "estudia emprender acciones ante la propia Junta Electoral Central y la Fiscalía" si, al final, consideran que existen "pruebas suficientes de irregularidades electorales".
Armas expresó que la diferencia de votos entre su partido y CC "no es lo suficientemente sobrada como para que se produzca un vuelco en La Palma", si bien admitió que "existen instancias a las que CC puede acudir aún que pueden determinar la existencia de nuevos elementos que abran un tercer recuento del voto exterior y del que pueden surgir más votos que favorezcan a CC, el PSC y al Partido Popular (PP)". Por ese motivo, Armas se mostró cauto y manifestó que el PSC "aún no canta victoria".
El líder socialista añadió que "CC no se resigna a la lección que le ha dado el electorado al convertirla en la tercera fuerza política del archipiélago, por lo que intentará arañar votos hasta las últimas consecuencias", si bien matizó que los nacionalistas "están en su derecho de acudir a las instancias que crean oportuno".
"La mezquindad de CC los llevó a decir que el PSC quería tapar la boca a los canarios en el exterior, cuando son los nacionalistas, que se niegan a modificar el sistema electoral, los que impusieron un diputado por Gran Canaria con unos 19.000 votos y dejaron fuera a Nueva Canarias, que obtuvo más de 44.000 votos en esa isla". Por ese motivo, "y en respeto a la institución democrática, CC no tiene autoridad moral para acusar a nadie de que los propios nacionalistas hacen".
El jefe de los servicios jurídicos de CC, Alfredo Belda, también se mostró precavido porque al tiempo que recordó la existencia de los más de 700 votos sobre los que su partido ha presentado reclamaciones, advirtió de que "nadie sabe aún cuántos corresponden a la isla de La Palma". Así, CC considera que continúa la incertidumbre del escaño que el recuento de hoy ratifica para el socialista Anselmo Pestana "porque podría" pasar a la nacionalista Jamnia Brito.
Los socialistas también se han dirigido a la Junta Electoral de Canarias para solicitar la lista de votantes en el exterior y cotejarla así con el listado de votantes por cada país. Una vez contrastados los dos listados y en función de las conversaciones que sostendrán mañana los socialistas canarios con los de Madrid, el partido decidirá si procederán a interponer algún recurso. La alarma se encendió entre los socialistas cuando sus interventores "tuvieron la percepción" en el primer recuento de los votos del exterior de que una cantidad "inusitada" de sobres "venían escritos con la misma caligrafía".