LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
El jefe del grupo de trabajo de Áreas Urbanas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Adam Ostry, señaló hoy que la sostenibilidad de las metrópolis "depende en gran parte" de la ordenación urbanística.
Ostry indicó que esta sostenibilidad de las áreas urbanas depende, además, de la planificación de los servicios y de cómo se ofrezcan éstos a los ciudadanos, de ahí que apuntó a que las infraestructuras "no deben suponer una carga para el territorio, una ciudad que crezca sin control necesitará mayores inversiones para garantizar las infraestructuras de transporte, espacios libres o viales a sus ciudadanos".
Este experto de la OCDE realizó dichas declaraciones en el ámbito del encuentro internacional que dicha Organización celebra en Las Palmas de Gran Canaria, según informó el Ayuntamiento grancanario.
De todos modos, Ostry aseguró que las ciudades "pueden ser sostenibles independientemente" de su tamaño aunque "hay que analizar hasta qué punto la ciudad dispone de los equipamientos que necesitan sus ciudadanos. La OCDE estima que hay un techo de 6 millones de habitantes pero ciudades como Los Ángeles han demostrado que este techo es relativo".
Añadió que la OCDE ha realizado estudios a más de 20 ciudades de los estados miembros en los que se recogen una serie de indicadores que ofrecen indicadores sobre la sostenibilidad de las ciudades que ayudan a evaluar la situación con el fin de destinar las medidas que son "necesarias tomar, así como los avances que se alcanzan tras aplicarlas".
En este sentido el responsable de la OCDE dijo que "afortunadamente" una ciudad como Madrid "tiene los mismos retos" que los que afrontan otras metrópolis como Montreal, Copenhague o Seúl "a distinta escala". Al respecto, apuntó que esto "significa que las soluciones que se está aplicando pueden ser compartidas por la mayoría de las ciudades".
PARÍS, SIN COCHE
Por su parte, la asesora de Desarrollo Sostenible de París, Helene de Largentary, se centró en el objetivo del Ayuntamiento de París destinado a que sus habitantes "puedan vivir sin tener un coche propio". Por ello, señaló que se están desarrollando una serie de acciones para fomentar la movilidad en transporte público a través de potenciar los medios de transporte tradicionales, tales como el autobús o incrementando los carriles destinados para uso "exclusivo" de éstos, y creando nuevas fórmulas de movilidad que no produzcan emisiones de CO2.
En este sentido, la asesora presentó el modelo parisino de alquiler de bicicletas, en las que los ciudadanos se pueden desplazar dentro de la ciudad por un precio "muy asequible", pudiendo coger las bicicletas en un punto y dejarlas en otro, "un modelo que está dando muy buenos resultados".
Asimismo, anunció la creación para el próximo año de un modelo similar de préstamos de vehículos eléctricos, por un precio un "poco mayor", destinado a que se pueda alquilar un coche eléctrico en un punto de la ciudad y devolverlo en otro. De esta forma, París pretende cumplir con el compromiso de la ciudad de reducir en un "25 por ciento" las emisiones de gases que se lanzan a la atmósfera.
Largentary indicó que París también quiere extender el uso de las energías renovables, que esperan incrementar en un "25 por ciento", así como la reducción del "25 por ciento" del consumo eléctrico en "toda" la ciudad para lo que "el Ayuntamiento debe dar ejemplo en todas sus instalaciones y no dejar de trabajar codo a codo con la ciudadanía".