LOGROÑO 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Miguel López, se ha referido hoy a la doble crisis, estructural y general, que afecta a la agricultura y que podría ocasionar la "ruina" de los productores como consecuencia de la caída de los precios y la "posición de dominio" de las compañías agroalimentarias y de la cadena de distribución.
López hizo estas declaraciones a la prensa, acompañado por el consejero de Agricultura, Íñigo Nagore, antes de la presentación del Anuario Agrario 2009, elaborado por la propia organización, y la celebración de una jornada sobre el sector vitivinícola.
El máximo responsable del COAG no escondió que "el sector agrario está inmerso en una crisis estructural", ocultada en parte por la crisis general, y cuya principal consecuencia es la caída de los precios.
Esta circunstancia está incrementado la posición de dominio de las compañías agroalimentarias y de las cadenas de distribución, que aplican unos márgenes "abusivos" e "incomprensibles" en perjuicio de los consumidores.
Ahondando en el origen de esta crisis, López se refirió a la reforma de la Política Agraria Común (PAC) de 2003, que ha suprimido "los mecanismos de regulación del mercado" y ha propiciado que bajen los precios en origen, sin que por ello se beneficien los consumidores.
PRESIDENCIA DE ESPAÑA EN LA UE
Desde COAG se reclaman medidas que redunden en el "interés general" en vez del "interés particular o especulativo". Por ello, abogó por establecer un "marco de interlocución serio" con las administraciones y trabajar en la reforma de la PAC de cara a 2013 coincidiendo en que España asume en el primer semestre de 2010 la presidencia de la Unión Europea.
"España no se puede permitir abandonar un sector estratégico como el agroalimentario", afirmó.
Por su parte, el consejero de Agricultura, Íñigo Nagore, subrayó el "pesimismo" que envuelve al anuario de este año, fruto del "pesimismo" que desprende el sector ante la actual situación económica.
En su opinión, es preciso una "reflexión" para salir de la crisis y establecer la "política agraria de futuro".