Los testigos del entorno de los dos principales acusados en el juicio de los 'Payasos Justicieros' se contradicen sobre quien controlaba a quien
LOGROÑO, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un joven del entorno de los acusados de robar y quemar coches autoproclamándose 'Payasos Justicieros' ha asegurado hoy que el presunto cabecilla, D.L, se jactaba de sus delitos: "Lo decía tan normal, como poderoso: He quemado un coche".
Se juntaban en lo que conocían como 'El circuito' (en el aparcamiento del Palacio de los Deportes) y de ahí habría salido el grupo de 'Payasos Justicieros', acusados de robos e incendios incluidos tres en garajes comunitarios (y en uno de los cuales peligró la vida de los vecinos).
Hoy, en la sexta sesión del juicio, han comparecido testigos del entorno de dos de los principales acusados, D.L y T.G (pareja en ese momento).
El entorno de T.G ha coincidido en que ella estaba sometida y atemorizada: "Hasta en prisión cambió, se le veía libre, feliz", ha llegado a decir el padre de ella. "Era al revés", ha contradecido la hermana de él.
Un joven amigo de ella ha contado cómo era "normal" que D.L le llamara "puta zorra" y que, además, le obligaba a llevar jerseis de cuello alto en pleno verano, haciendo incluso que volviese a casa a cambiarse.
"Cuando no estaba con él era otra persona", ha relatado contado episodios de celos que le impedían a ella darle dos besos a un amigo o, incluso, estar con otras personas. "La tenía tan manipulada que no sabía de su existencia", ha indicado.
También ha asegurado saber que él le cogía el móvil para mandar mensajes: "Yo sé cómo escribe Tania, y ya sabía cuando estaba con él o no". Así, ha dicho que ella no cometía faltas de ortografía ni acortaba tanto las palabras como él. "Eso de cerillazo era la firma de" D.L, ha aportado también en referencia a un mensaje.
Este amigo de ella ha relatado, también, situaciones en las que D.L reconocía quemar vehículos. "Vengo de Villapatro de quemar un jeep", ha señalado que dijo en una ocasión. "Lo decía tan normal, como poderoso: He quemado un coche", ha afirmado al tiempo que ha añadido que "tenía la esperanza de que lo cogiese la policía".
También, que estaba "obsesionado con matar" a otro joven que acudía al lugar y del que le confesó "que le había quemado la moto porque tenía obsesión con matarlo". El padre de T.G, en este sentido, ha dicho que incluso tenía pensado torturarlo, matarlo, descuartizarlo y quemarlo.
A preguntas de la defensa de D.L se ha sabido que, cuando ingresó en prisión, este testigo amigo de T.G publicó en su Instagram: "Púdrete en la cárcel quema garajes y coches", algo que está denunciado.
En cuanto al padre de TG, con desazón, ha contado cómo había visto llorar a su hija porque D.L le decía "que vestía como una puta". "Tenía planes de matarme a mi y a ella, quemarme la furgoneta, quemar su coche", ha dicho.
Ha asegurado que le "apartó" de ella, su hija dejó de ir a comer a su casa "porque era un celoso" e hizo una pintadas contra ella (cuando rompieron) en las que escribía "zorra muerete".
"Una vez le besé en la frente y salió revolucionando el coche", ha contado en sus relatos de ataques de celos; y ha añadido que le pinchó una rueda y que sabía que era él porque conocía cómo lo hacía.
"Cuando estaba con él estaba amargada, triste; hasta en prisión cambió, se le veía libre, feliz", ha afirmado. Ha dicho que llegó a decirles: "Vaya mierda de hija que habeis parido".
La hermana de D.L, en cambio, ha dicho que era al contrario. Que ella no le dejaba hablar con otras chicas, ni siquiera quería que les arreglara coches en el taller y que se dedicaba a acudir ahí a "molestar" y vigilar a D.L.
"Le cogía el móvil ella a él, se metía en Instagram y le borraba las amigas", ha dicho. En cuanto a si le obligaba a vestir tapada ha afirmado que "era al revés, ella le decía a él cómo se tenía que vestir". También ha contado que ella cambió de móvil y le pidió que borrara los mensajes sin más explicaciones.
Ha asegurado que obligó a su hermano "a hacer lo que hizo". "Porque ya sé como es", ha aseverado.
Otro testigo, amigo de T.G, ha dicho presenciar cómo D.L explotó un coche en el taller. También, ha relatado cómo D.L usó el Instagram de T.G para quedar con él, haciéndose pasar por ella, y luego le amenazó con una navaja. Ha coincidido en que cuando volvió con D.L ella "no era la misma".
A continuación, la Fiscal le ha preguntado por un número de teléfono y él lo ha reconocido como suyo. Después, tras leerle una conversación en la que T.G hablaba de que había habido "cohetes" y este testigo le contestaba que había habido "cerillazo", ha dicho que no recordaba esa conservación y que tal vez no era su número de teléfono.
Y a preguntas de la defensa de D.L ha reconocido que viajó en coche con D.L y T.G porque le llevaron a recoger un vehículo suyo en Navarra.
HECHOS QUE SE LES IMPUTAN
A los cuatro acusados (D.L y T.G; I.A y N.M, dos parejas de novios) se les acusa de quemar diez automóviles (seis en el lugar donde estaban aparcados); robar y quemar una moto; incendio en las instalaciones de Bodegas Marqués de Murrieta; dos automóviles dañados (uno abandonado en el Monte Cantabria); y el incendio en tres garajes comunitarios de Logroño.
Los investigadores, además de un trabajo a pie de calle, enfocaron sus pesquinas en las redes sociales, donde los detenidos, siguiendo fuentes policiales, se jactaban de lo hecho y se autodenominaban 'Payasos Justicieros'.
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